La recesión económica no solo se llevó por delante el sector de la edificación. La matriculación de coches a estrenar, en concreto, se resintió de tal forma que hubo un momento en el que se rozó el stock de turismos de segunda mano. La lenta mejoría permite que, a nivel estatal, el primer semestre del año se cierre con 667.494 nuevas matriculaciones, que suponen un 7,1% más que en el mismo periodo del ejercicio pasado. Sin embargo, esta recuperación resulta bastante más suave al hablar de los datos de las comarcas: entre enero y junio, estrenaron coche 420 personas, sólo una más que el ejercicio anterior. Pero ojo, porque la cifra es menos de la mitad de las 929 matrículas que se contabilizaron en los seis primeros meses de 2007, hace justo una década y cuando la crisis aún estaba en ciernes.
El IGE, que dispone ya de los datos de matriculaciones de junio, permite hacer una comparativa con todos los vehículos. Así, el primer semestre se cierra en Deza y Tabeirós con 86 nuevas altas, por debajo de las 96 del año pasado y muy lejos de las 292 de 2007, hasta tal punto que suponen un descenso del 69% en comparación con esos datos de una década atrás.
Como decimos, el descenso de altas se debe a la caída en la venta de coches nuevos, pero también a la de camiones o furgonetas y remolques. Ello se debe a la quiebra de decenas de empresas en estos últimos años, o al reajuste de plantilla de las mismas, que les obligó a recortar su flota. Veamos los datos de este junio por tipo de vehículos: en turismos se alcanzaron los 64 (en 2016 fueron 70 y en 2007 se llegó a los 175). Como de costumbre, salvan las cifras las dos cabeceras comarcales: en Deza, de los 38 totales, 16 pertenecen a Lalín, mientras que el resto se reparte entre Silleda (9), Vila de Cruces (5), Rodeiro y Agolada (4 cada uno). Del mismo modo, A Estrada copa 23 de las 26 matriculaciones de Tabeirós-Terra de Montes, donde los 3 restantes se vendieron en Forcarei. Para darnos una idea de la evolución en la compra de coches, hace 10 años, en Lalín se matricularon 57, y en A Estrada 41, es decir, poco menos que el total que suman ahora los nueve municipios.
En el resto de vehículos, las cifras ya se quedan por debajo de la decena. Se contabilizan 8 matrículas de motocicletas: 3 en Lalín, 2 en Silleda y 1 tanto en Vila de Cruces como A Estrada y Forcarei. En 2007, se alcanzaron las 27 nuevas unidades. Eso sí, al menos las 8 mencionadas son el doble de las que hubo en 2 016 en el mismo periodo.
Pero, como decíamos, vehículos vinculados a actividades empresariales, como remolques, son otros de los que padecen la crisis. Junio termina con 7 altas: 3 en Lalín, 2 en A Estrada y una tanto en Rodeiro como en Silleda. Sí, superan holgadamente la única que hubo en junio del año pasado, pero es que en 2007 se alcanzaron las 28 matriculaciones, es decir, cuatro veces más. Cabe destacar, por eso, la caída de camiones y furgonetas, con 5 altas: 2 en A Estrada y una en Silleda, Cruces y Forcarei. Aquí ya se produce una merma en comparación con las 10 del año pasado y, por supuesto, también se marca distancia con las 22 de hace una década. Las 86 unidades que se matricularon en total en junio se completan con la venta de un autobús, en Vila de Cruces, y otro vehículo diferente a los citados, en Silleda. De este modo, en junio no hubo matriculaciones ni de tractores industriales ni de ciclomotores.
