"Cada dos por tres nos quedamos sin agua. Esta vez rompió al mediodía" del domingo." Vino la Policía Local y cortó el suministro. Hubo una rotura y no la vinieron a reparar. Pobres de nosotros si hay un incendio... ¡Ardemos como chispas!", se lamentaba Milagros Parada, indignada por el largo corte en el suministro de agua que ocasionó en el entorno de Fernando Conde la segunda rotura en apenas dos días de las viejas tuberías de fibrocemento que conforman la deteriorada red de abastecimiento de la citada avenida estradense. El corte duraría aun 22 horas.

"Es un cachondeo. Vamos al Concello y no nos hacen caso. Pagamos los impuestos, podamos o no podamos. ¡A ver si el alcalde tiene a bien no cobrarme este mes el recibo del agua! Me dirá que tengo que pagarlo tenga o no tenga agua. No es ni la primera ni la segunda vez que nos pasa. Hace dos meses y medio rompió un viernes y tuvimos que protestar para que no nos dejasen sin agua todo el fin de semana. Rompe seguido. Vienen, cortan y no nos avisan", con el consiguiente riesgo para sus electrodomésticos, apunta. Tenía la lavadora lavando, llena de ropa". La apagó. Lo mismo hizo con el termo de la caldera. Tiene "miedo a que explote".

Esta vez tuvo suerte. Su marido pasó casualmente el domingo por Fernando Conde -en torno a las 13.30 horas- y vio que la Policía Local estaba constatando la existencia de una rotura en la traída. El agua ya llegaba a la rotonda de As Colonias. En su casa -radicada junto a Lennon- todavía tenían agua si bien con mucha menos presión. Se ducharon a toda prisa y "menos mal", relata. A las 14.00 horas ya no salía "ni gota" del grifo. Ayer tenían que ir al médico. Tuvieron que lavarse tirando de agua de garrafa y de "toallitas". Y es que el corte en el suministro de agua duró finalmente unas 22 horas.

De hecho, según el alcalde en funciones de A Estrada, Juan Constenla, tras trabajar toda la mañana de ayer en la reparación de la avería los operarios municipales iniciaron las maniobras de llenado de las tuberías -con lentitud y mucho cuidado para evitar que se produjese una nueva rotura- en torno a las 12.10 horas.

Efectivamente, Milagros Parada -una de los "pocos vecinos" que, según Constenla, resultaron afectados por el corte en el suministro en el tramo final de Fernando Conde, en la Estrada a Vinseiro y la zona próxima a Lennon donde está la vivienda de esta afectada- volvió a tener agua a las 12.30 horas de ayer.

Cruza los dedos para que no vuelva a suceder. Y a buen seguro que desde el gobierno y las brigadas municipales, también. Las continuas incidencias en la traída motivan que los operarios no salgan de esta zona. De hecho, tal y como ya avanzó FARO, el viernes se detectó que "rezumaba agua" en el cruce de la nacional N-640 -en las inmediaciones del desguace de Meilán y, para evitar que rompiese el fin de semana hizo una reparación provisional. Ayer hizo la definitiva. Y el sábado, a las cinco de la madrugada, se detectó en Fernando Conde la rotura que, como ya informó FARO, dejó varias horas sin agua al tramo final de la avenida.