Una vecina del lugar de Vilanova, perteneciente a la parroquia estradense de Santeles, denunció ayer la muerte de cuatro ovejas y la desaparición de dos corderos a consecuencia, según apuntó, de un ataque de lobo. Los hechos ocurrieron a plena luz del día en una finca junto a la vivienda familiar.

"Les abrí a las ocho y cuando llegué, que tengo jornada de mañana, ya estaban muertas e hinchadas", por lo que sospecha que el ataque se produjo "a primera hora". "Mató las cuatro ovejas y se llevó dos corderos", la totalidad de los animales que la dueña criaba simplemente para pastar la finca. "¡No dejó ninguna viva!", lamentó.

Según detalla, el prado está cercado con una malla que no alcanza el metro de altura. Dice que no puede cerrar de otra manera su parcela porque Augas de Galicia se lo impide por la cercanía de "una presa". Si quisiese hacerlo tendría que "dejar un mínimo de cinco metros", apunta. Es por ello que, en esta ocasión, el cánido lo tuvo más fácil a la hora de acceder a las ovejas y a sus crías.

No es la primera vez que esta vecina de Santeles sufre bajas entre sus animales. Comenta que el zorro también atacó hace un tiempo sus ocas. Al cierre de esta edición, la afectada esperaba la visita de agentes del servicio de comprobación de daños por ataques de lobo para que levantasen acta de lo ocurrido y certificasen si, efectivamente, se trata de una incursión autoría de este animal.