Las autoescuelas de Deza y Tabeirós-Montes apenas sufren, por el momento, las secuelas de la huelga de examinadores que comenzó esta semana y que se prolongará hasta el 31 de julio. Los examinadores realizarán paros todos los lunes, martes y miércoles, de modo que los alumnos de las autoescuelas que tengan fijadas pruebas esos días pueden verse obligados a, una vez presentados en Pontevedra, tener que volver una o dos semanas después para poder realizar los exámenes.
La práctica totalidad de las escuelas de las comarcas desplazan a sus matriculados para los exámenes los jueves y viernes, de modo que la primera tanda de huelga pasó desapercibida para la zona. Solo la autoescuela Cíes, en Silleda, padeció las consecuencias del parón. Sus alumnos se examinan todos los lunes, y en el de esta semana llevaba media docena de aspirantes a pasar la prueba práctica. Hasta última hora de la mañana estuvieron con la incógnita de si dispondrían o no de un examinador.
Pero puede ocurrir que, en los que meses venideros, los efectos de la huelga sí sean más palpables, porque cada autoescuela tiene un día concreto para examinarse. Pero si esa jornada cae en festivo, su turno pasa al siguiente día laboral, de modo que las demás autoescuelas mueven su turno también una jornada. Si a ello se suma que en agosto algunos examinadores cogen vacaciones, es muy probable que se forme cierto "embudo" a la hora de despachar los exámenes prácticos, como indican desde la autoescuela Auces, de A Estrada. Esto puede afectar a alumnos que se plantean sacar el carné de conducir en un mes (puede prepararse a la vez el examen teórico y el práctico), pero el retraso en realizar la prueba práctica podría ser de unas dos semanas, calculan desde San Pelayo, también en A Estrada.
La huelga de los examinadores arranca justo cuando aumenta de forma muy notable la actividad de las autoescuelas, gracias a que el verano es el período en que los jóvenes con 18 años recién cumplidos deciden sacarse el carné. La subida de alumnos se nota de forma generalizada: en la autoescuela Lalín pasan de las 8 matrículas en mayo a las 30 en junio, y durante el verano envían a examen a unas 100 personas, mientras que en la citada Auces durante el verano suelen enviarse a examen entre 12 y 15 personas por semana (tramita unos 100 carnés al año), que en el caso de San Pelayo son 10 alumnos por semana (y unos 60 carnés en cada ejercicio). Que se mantenga el ritmo de matrícula se debe, sobre todo, a que "la gente no es consciente de la huelga", apuntan desde la Autoescuela Cancela, en A Estrada, una circunstancia de la que también son conscientes las otras firmas de las comarcas. También es cierto que, en esta primera tanda de parones, los efectos se dejaron notar bastante más en Vigo que en Pontevedra, donde suelen operar ocho examinadores, y con los parones hay cuatro.
En cualquier caso, y hablando siempre del permiso B, que permite pilotar un turismo, desde que se aprueba el teórico el alumno dispone de dos años para sacarse el práctico. Dispone de tres oportunidades para aprobar las dos pruebas, y una de las cuestiones que se plantearán los alumnos es si debe continuar haciendo prácticas o no en caso de que le aplacen el examen.
