La Xunta autorizará al Tecor A Rocha a efectuar batidas al jabalí con armas mañana y el domingo, 10 y 11 de junio, al haber aceptado el jefe de servicio la recomendación realizada por el agente zonal de Tabeirós que -tal y como informó FARO ayer- estuvo examinando el miércoles los daños ocasionados en los cultivos. Según fuentes de la Consellería de Medio Ambiente e Ordenación do Territorio, dicho agente habría estado "con cazadores y ganaderos de las parroquias de Curantes, Olives, Rubín, Lamas y Pardemarín examinando las fincas dañadas y planificando las medidas de control a aplicar". A este respecto, agregan las mismas fuentes, "dado que ya durante cuatro días se utilizaron perros sueltos y visto que esta medida no fue efectiva se recomienda por parte del agente la autorización de batidas para este fin de semana".
Serán muy bien acogidas por los ganaderos, que las esperan como agua de mayo para frenar los continuos daños a sus cultivos que aseguran que están poniendo en serio riesgo la viabilidad de sus explotaciones agrarias. Así lo explicó en la mañana de ayer, por ejemplo, José Manuel Paz, uno de los grandes ganaderos de la zona más afectada que regenta una explotación con más de un centenar de cabezas de ganado bovino en Curantes si bien para conseguir alimentarlas cultiva fincas en otras parroquias próximas como Rubín. Precisamente en predios de Rubín y de Pousada (Curantes) sufrió nuevos daños en la noche del miércoles al jueves. El jabalí le levantó tres surcos de 100 metros de longitud el grano de maíz que había sembrado, y realizó grandes agujeros en el predio. Las pérdidas para él no se quedaron ahí. En esa misma madrugada, el jabalí le realizó en una finca de prado que guardaba para ensilar "agujerazos mucho más grandes" donde cabría entero el jabalí. "Anduvo fozando", explica, antes de indicar que ya ha sufrido daños en 11 de las 22 grandes fincas que cultiva. Pide que se tomen medidas. "Tengo 22 fincas. Me harían falta 30 pastores porque uno no alcanza para todo", remarca, angustiado por haber "gastado el dinero" de las siembras y sufrir nuevos daños que sabe que no serán compensados con ayudas. "Todavía no sacaron la orden de ayudas" y estas son "miserables" y no tienen carácter retroactivo, apunta, convencido de que la Xunta debería sacarlas en abril. Eel año pasado las convocó en julio, cuando los mayores desperfectos se registran en la época de siembra: entre abril y junio. Además, agrega, independientemente de la superficie afectada, el máximo de indemnización por explotación asciende a 1.500 euros.
A mayores, apunta a la problemática del cuervo, que espera a que brote el maíz y con el pico le arranca el grano, rompiendo la planta. " Es una debacle", se lamenta. "Van a acabar con el agro. Proteger a los animales está bien pero tiene que haber un equilibrio", remarca.
Precisamente a la necesidad de cuidar ese equilibrio se remitió ayer el agente facultativo medioambiental Juan Domínguez, que el pasado sábado varió los planes de realización de batida con armas que tenían cazadores y ganaderos de A Estrada. Ayer explicó a FARO esgrimiendo documentación al respecto que él no suspendió la batida previsto sino que la modificó para cumplir con lo indicado en el protocolo acordado el 6 de abril en Pontevedra por la Consellería de Medio Ambiente, diversas asociaciones agrarias y representantes de los cazadores para reducir los daños agrícolas producidos por el jabalí. Entendía que no se habían agotado las medidas establecidas en ese protocolo. En cumplimiento del mismo, los cazadores del Tecor A Rocha ya habían ido con perros atados varios días entre el 20 y el 28 de mayo. Pero, de acuerdo con la autorización que antecedía a la otorgada el 2 de junio para la realización de la batida con armas prevista para el día 3, entendía que los días 3, 4, 10 y 11 procedía que los cazadores fuesen al monte con perros sueltos. Y si ni así se lograsen los resultados perseguidos y continuasen los daños en cultivos se podrían solicitar esperas o batidas con armas. Agrega que al actuar de manera gradual se intenta evitar perjuicios al resto de la fauna que habita los montes en plena época de nidificación y de cría hasta principios de julio. "No solo hay jabalí en el monte. Hay muchas más especies", hace notar. No obstante, el agente admite que los ganaderos estradenses tienen razón en estar "cabreadísimos" por los constantes daños. "Pero hay que constatarlos", apunta. Por eso, indica que hay que seguir los pasos establecidos, como ocurrió al ir el agente zonal a revisar los daños y emitir el informe en base al cual ahora la Xunta anunció ayer que autoriza la batida con armas.
Esta será ejecutada previsiblemente por una veintena de cazadores, según la previsión del presidente del Tecor, José Manuel Toledo, incidiendo en las zonas donde más se registran los ataques: fundamentalmente en Olives, Lamas y Curantes.
