La llegada de la primavera despierta la actividad en las áreas fluviales y zonas verdes, donde repunta la afluencia de visitantes ávidos de disfrutar de un día al aire libre en plena naturaleza. La tranquilidad que estos buscan en este tipo de parajes no la comparten, sin embargo, las brigadas de limpieza municipales que, más que nunca en esta época, apuran la puesta a punto de estos enclaves, con trabajos de desbroces y acondicionamiento de los espacios y del mobiliario que existe en muchos de ellos. Según datos de la Encuesta de Infraestructuras y Equipamientos Locales (EIEL) de la provincia de Pontevedra, la comarca de Tabeirós-Terra de Montes dispone de 222.882,40 metros cuadrados de superficie de zonas verdes y parques.
El 80% de la citada superficie corresponde al municipio de A Estrada que, según la misma fuente, cuenta con 178.726,08 metros cuadrados. En una parte de ellos actuarán los operarios municipales. Desde la pasada semana, trabaja ya la brigada de desbroces, creada a raíz de la contratación de trabajadores del Plan Concellos 2017 de la Diputación. Está dotada de nueve personas que realizan trabajos de limpieza manuales tanto en los espacios verdes del casco urbano como en las parroquias, acondicionando los campos de la fiesta, el entorno de los locales sociales y otros puntos de uso público como fuentes o lavaderos. En algunos casos, esta labor la acometen en colaboración con los vecinos, según manifestó la pasada semana el alcalde, José López Campos.
Llegar a todos los puntos es tarea prácticamente imposible, máxime cuando en esta época se acelera el crecimiento de la hierba y de la maleza como proceso natural en la primavera. Según el edil de Medio Rural e Medio Ambiente de A Estrada, Juan Constenla, la única área recreativa que depende directamente del Concello es la de San Miguel de Barcala. En ella se realizó recientemente una limpieza, en la que participaron vecinos y voluntarios interesados en poner en valor este espacio natural como punto de esparcimiento y atracción de turistas.
La nueva brigada municipal tiene también en previsión el desbroce de otros enclaves, como el parque situado junto a la playa fluvial de Liñares, donde existe una área con elementos de juego para los niños. Asimismo, según apunta el edil estradense, el Concello también limpiará las áreas fluviales de Couso y Ximonde, muy frecuentadas no solo por pescadores que acuden a sus cotos salmoneros sino también por vecinos y visitantes que encuentran en este espacio un lugar idóneo para disfrutar de una comida campestre o, simplemente, de un paseo con el río Ulla coronando el paisaje.
En el caso de Forcarei -municipio que suma 8.258,32 metros cuadrados de zonas verdes y parques, según datos de la EIEL, es en el transcurso del Lérez donde se reparten las áreas recreativas. "Hacemos la limpieza una vez al año, en junio, para poder disfrutarlas en verano y que nos queden listas el resto del año", explica la alcaldesa forcaricense, Belén Cachafeiro. La de A Freixeira, la más utilizada, puede ya disfrutarse, como hicieron, por ejemplo, el pasado viernes unos 650 estudiantes, que eligieron este enclave para un encuento escolar. En el lugar hay mesas, bancos, parrillas, baños e incluso alumbrado público. Otra de las más frecuentadas es la de Cotelo, en Forcarei, que también dispone de mesas. Otrora contaba con parrillas, pero fueron retiradas por el Concello. El área de Ponte do Andón, en Aciveiro, y la de Ponte do Crego, en Dúas Igrexas, son otros de los espacios verdes en los que actúa el Concello realizando labores de puesta a punto.
Cabe señalar que estas áreas del entorno del río Lérez, de titularidad pública, no son zonas de baño declaradas.
