Esquerda Unida, por boca de la diputada Eva Solla, reitera su apoyo a los trabajadores de la central de emergencias del 112 que permanecen en huelga indefinida desde el pasado 15 de abril por el traslado del servicio a A Estrada.

La formación denuncia la situación laboral "aberrante" que viven estos operarios que, según explica, "no recibieron la suficiente formación" y "sufren salarios de miseria, así como situaciones de ansiedad y estrés". Es por ello que exige "la recuperación del 112 como servicio público, con personas con formación concreta en emergencias al frente", señala. A este respecto, Solla explica en un comunicado que "cuando una persona llama al 112, quien le atiende no es un empleado público, es una trabajadora o trabajador de telemarketing contratado por la empresa Telemark", a la que la Xunta adjudicó el servicio, operarios que "están ahí para salvar vidas, no para vender productos", si bien, según apunta, "los salarios que perciben están asimilados al convenio de telemarketing y son precarios". Esquerda Unida alude también a los "problemas graves" que acusa el nuevo sistema de gestión de las llamadas de la plataforma del 112, "como que se quedaba colgada en la entrada de llamadas", y a "la falta de un mapa actualizado de recursos para movilizar" en las emergencias.