El segundo salmón de la temporada en los cotos salmoneros estradenses del Ulla -un ejemplar salvaje de 79 centímetros y 5.198 kilos de peso- sucumbió poco antes de las 12.00 horas de ayer ante Manolo Aldariz, un veterano pescador ribereño que ya ganó en 1985 el Concurso Internacional de Pesca do Salmón organizado por la Sociedade Deportiva Río Ulla. Fue uno de los 12 pescadores que ayer tuvieron la fortuna de pescar en el que sin duda es el coto más deseado, el de Ximonde. Por sorteo le correspondió probar suerte en el segundo turno y, apenas había realizado 4 o 5 lances cuando picó el ejemplar del pez rosado que le ayudaría a extraer del río con una "sacadeira" uno de los pescadores asturianos que se dan cita este año en el concurso. Manolo Aldariz, que tiene 81 años y vive apenas a un kilómetro de donde se produjo la captura (en el establecimiento de turismo rural Casa Suárez de Ponte Sarandón de Vedra, dotado de un Museo da Pesca), estaba pescando en el puesto denominado O Penedo, como el vigués Joaquín Iglesias, que capturó el "campanu" del Ulla el pasado 1 de mayo.

Aldariz fue el único de los 48 deportistas que compiten en el XLI Concurso Internacional de Pesca de Salmón, entre los que también figura el exministro Francisco Álvarez Cascos. A este le reconoció ayer el guarda de Río Ulla, Ramiro Aller, haber contribuido a la difusión del certamen al acudir al Ulla en 2002. Hasta entonces, recordó Aller, el número de participantes rondaba la veintena y rara vez superaba los 25. La difusión mediática de la participación de Cascos en 2002 despertó el interés de los deportistas asturianos, vascos, cántabros y hasta madrileños por esta competición.

De hecho este fin de semana -el torneo continúa hoy en los cotos de Ximonde, Santeles, Pontevea y Sinde con turnos de pesca- suma muchos deportistas gallegos (de A Estrada, Teo, Santiago, Vigo o Cangas, entre otras localidades) pero también pescadores asturianos y hasta uno de Bilbao. La mayoría apostaron ayer por cucharilla aunque también hubo quien eligió cebo a base de quisquilla y camarón. Así lo confirmaron Aller y el experto en pesca Salva Ortega, de Ás Orillas do Ulla, que estiman que el río -con un caudal más abundante tras varios días de lluvias y con cierta turbidez- estaba "inmejorable" para pescar pero que, sin embargo, las expectativas de capturas desde el inicio eran pesimistas porque apenas se ven salmones. Otro ejemplar picó ayer en el puesto denominado O Pozo do Bote, también en Ximonde, pero logró desengancharse. El desánimo hacía mella a medida que pasaban las horas entre los deportistas, que por la mañana tuvieron una sesión de pesca marcada por nubes y claros pero por la tarde soportaron lluvias constantes. A pesar de todo, había mucha expectación. La carpa con bar habilitada por Río Ulla junto al aparcamiento de Ximonde permitía tomar algo a escasa distancia del río. Es un modo de vivir la Festa do Salmón, contemplando de cerca una competición que fija en cada una de sus jornadas 4 mangas: dos matutinas (de 8.00 a 10.30 y de 10.30 a 13.00) y dos vespertinas (de 16.00 a 18.30 y de 18.30 a 21.00 horas). Los 48 pescadores rotan por los cuatro cotos, probando suerte en cada turno 6 en Sinde, otros tantos en Pontevea, otros 6 en Santeles y 12 en Ximonde.

Es la vertiente deportiva de la Festa do Salmón, cuya parte gastronómica comienza a degustarse en A Estrada. Ayer, sirvieron tapas del pez rey el Enredo, A Pequena Taberna, 20 Berzas t Velis Nolis Bistró. Hoy tomarán el testigo Argentinos Burguer con su Flor de salmón e calabacín; Café Boliche con su Espetada de croquetas de salmón con tomate cherry e base de salmón afumado; A Taberna da Feira con Mariquitas en mar de salmón; Tapería O Lar con Cheesecacke de salmón; y Nixon con su Salmón Nixon.