Es obvio que, si se adelanta la siembra de maíz, también se producirán antes las incursiones del jabalí en las fincas. Desde la vicepresidencia de Asaja, Francisco Bello admite que "es una especie con la que vamos a tener que convivir, porque por mucho que se controle, el jabalí no va a extinguirse". Añade los excelentes resultados de las batidas así como de la temporada de caza. Sin embargo, en municipios como Rodeiro o Dozón la presencia del jabalí sigue creciendo, bien porque emigra desde municipios vecinos donde se produjeron incendios o bien porque hay zonas vedadas donde cría, respectivamente. Precisamente, desde la Sociedade de Caza de Dozón su presidente José Rodríguez alertó semanas atrás de los riesgos de la presente campaña de siembra, ya que a partir de abril es la época de cría de jabalí y resulta más difícil que se autoricen batidas para eliminar ejemplares.