El departamento de Benestar Social, Igualdade e Educación, que dirige la concejala Amalia Goldar, inició esta semana los trámites para sacar a concurso público el contrato de servicios para la gestión de la escuela infantil municipal, que en estos momentos, y desde su creación, asume la cooperativa Frades, entidad con la que el Concello lleva años prorrogando contrato. La concejala entiende que toca iniciar el procedimiento para ofertar el servicio y que esta u otros organismos puedan optar a asumirlo.

Goldar encargó la elaboración de los pliegos técnicos y administrativos, tarea de la que ya se ocupan los técnicos municipales. "Ya estamos trabajando en ello", señaló antes de avanzar su intención de "tener los pliegos en quince días", aunque la contratación llevará más tiempo, será cuestión de meses. "Ya debería estar hecho, hay que reconocerlo, pero este año queremos, por fin, renovar el contrato", al considerar que es "un buen momento" para poner al día esta concesión ante la futura apertura de la segunda escuela infantil, de la Xunta.

Respecto al importe del contrato, la concejala explicó ayer que todavía no está cerrado, que lo están "valorando" y realizando un estudio de los posibles costes. En todo caso, avanzó que el montante rondará la cantidad ya consignada en el presupuesto municipal para este año -todavía no aprobado-, fijada en unos 280.000 euros. "Es una media, pero estamos valorando si podemos subirlo o tenemos que bajarlo", añadió. En realidad, esa es, aproximadamente, la cantidad que las arcas municipales destinan actualmente a la cobertura de este servicio.

Además de esta aportación municipal, la Xunta colabora anualmente con alrededor de 45.000 euros para la gestión diaria de estas dependencias. Por otra parte, las cuotas anuales de los padres y madres oscilan entre los 50.000 y los 60.000 euros, aunque esta cifra varía, dependiendo de las condiciones económicas de los progenitores con menores inscritos en la escuela. Con estas cifras sobre la mesa, se evidencia que es el Concello quien sostiene en mayor medida el servicio.

Previa a la fijación de la consignación presupuestaria para este fin y a la aprobación de los pliegos para sacar a concurso el servicio, Intervención municipal tendrá que realizar una valoración económica del contrato, atendiendo a los costes que este generaría. "Una vez que tengamos todo eso, se quitarán los pliegos y sacaremos el nuevo contrato de gestión", que consistirá en un procedimiento abierto, dado el montante de inversión que se maneja.

La futura adjudicataria tendrá que ocuparse de las siete unidades que actualmente tiene la escuela infantil situada en Figueiroa, que oferta 102 plazas, pero cuya matrícula supera los 150 niños.