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El "espantallo" que hace amigos

Más de 700 personas presencian la obra "Voa", un éxito de público y crítica

Arriba, un instante de la función celebrada la tarde del pasado domingo. A la izquierda, el público que presenció el pase dominical. // Bernabé/Cris M.V.

"La obra y el propio autor merecen que este espectáculo pueda ser disfrutado por el mayor número de personas posible". Son palabras de Xosé Lueiro, el director escénico de "Voa", estrenada con un rotundo éxito de público y crítica el pasado fin de semana en A Estrada. Hubo dos funciones: el estreno, el sábado, y una segunda el domingo, como colofón a casi tres meses de intenso trabajo.

La pieza, una adaptación libre de la dramaturga Ana Carreira a partir de la obra "O espantallo amigo" del finado escritor cruceño Xosé Neira Vilas, fue interpretada por la Escola Municipal de Artes Escénicas y la Escola de Baile, Canto e Música Tradicional Tequexetéldere. Serán sus miembros quienes ahora deban decidir si prolongar el buen sabor de boca y repetir los pases, en el Teatro Principal estradense y en otros escenarios dentro y fuera del municipio. La tarea no será fácil, y aunque a programadores de otros municipios "le encantó", es un espectáculo "complejo para trasladar a otros lugares", por la coordinación de personal y de recursos que conlleva, según explica Lueiro.

A espera de hacer una puesta en común, valorar los resultados y decidir si hacer o no más pases, el equipo saborea aún las mieles de dos llenos consecutivos y muy buenas críticas. Y es que el calor que transmite el aplauso de más de 700 personas -el aforo del teatro es de 372- quedará "marcado para siempre" en el recuerdo de quienes participaron en mayor o menor medida en el espectáculo, que tiene como protagonista a un "espantallo" que "cala muy hondo en nuestros corazones, convirtiéndose en una sensible, tierna y sencillo homenaje a la alegría de vivir", expresiones que utilizaba el propio Lueiro ayer en una reflexión publicada en la página web de la escuela de teatro local. Este valoró el trabajo conjunto de ambas escuelas. "Esa sensación de hermandad es lo más bonito", dijo no sin agradecer también el apoyo y la entrega del público. "Es precioso ver a la gente llorando en el patio de butacas al final de la obra", añadió.

Los niños que acudieron como espectadores recibieron como regalo un libro que recoge el texto de la obra -de Ana Carreira-, con ilustraciones de Rosa Herráiz.

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