Forcarei celebró en la mañana de ayer un pleno general en el que, a propuesta del gobierno encabezado por Belén Cachafeiro, se aprobó la supresión del impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, más conocido como impuesto de plusvalías. Esta propuesta fue votada a favor por todos los partidos del pleno forcaricense. Este impuesto de plusvalías le reportaba 9.000 euros a las arcas municipales pero su pérdida no supondrá ninguna merma en los servicios públicos y beneficiará a todos los ciudadanos. La tramitación de su suspensión definitiva continuará en el próximo pleno cuando con la aportación de toda la documentación para la aprobación inicial de la supresión.

El gobierno forcaricense también presentó en este pleno las cuentas del cuarto trimestre del pasado año 2016, en las que mostraba a la oposición que todos sus pagos se abonaron dentro de los plazos establecidos, así como los pertinentes informes de Hacienda en los que se constata que no tienen morosidad.

En el transcurso del pleno tomó posesión la joven de Forcarei, Verónica Pichel Guisande, quien prometió su cargo como nueva concejala. A la salida del pleno mostró su ilusión por esta nueva etapa y las ganas de aportar su grano de arena en el desarrollo del concello "sobre todo luchar contra la perdida de población y conseguir iniciativas que dinamicen el tejido hostelero, comercial y emprendedor de nuestro concello". Además, valoró positivamente que justo en el pleno en el que tomó posesión se aprobase una iniciativa "que el PSdeG-PSOE llevaba en su programa electoral como es la supresión del impuesto de plusvalías" que hoy propuso la alcaldesa en el pleno y que contó con el voto favorable de los socialistas.

La formación que encabeza Ana Doval lamentó que la alcaldesa no debatiese sus dos mociones, la primera para reclamar a la Xunta de Galicia un servicio municipal de atención a la mujer, evitando así que deban desplazarse a las ciudades para tener atención y asesoramiento o estar sin servicio como sucede en Forcarei, y la segunda sobre los daños del temporal en Forcarei, donde los socialistas reclamaban apoyo para los afectados a la hora de presentar reclamaciones a la compañía eléctrica o a la administración, así como una valoración objetivo y rigurosa de los daños sufridos.

Tanto desde el PSOE como desde Foro Forcarei y el BNG lamentaron la falta de diálogo y sensibilidad con los vecinos de la alcaldesa en relación al temporal y lamentaron sus declaraciones en las que sostenía que los daños no fueran "excesivamente elevados" y que la mayor parte de los incidentes se debieron a árboles caídos. Desde la oposición recordaron que, además de los daños en edificios municipales, también hubo daños a los vecinos, a los que se debe ayudar a reclamar.

En este sentido, Cachafeiro criticó la petición de los nacionales de crear un expediente para que Forcarei fuese declarado zona catastrófica. La regidora forcaricense defendió que este tipo de catalogación debe usarse en casos extremos y es un insulto para zonas que han sufrido daños mucho mayores.