Tener un gimnasio municipal en óptimas condiciones como el que va a haber en la piscina climatizada de A Estrada cuando concluya la proyectada reforma de sus instalaciones es “inviable e imposible”, en palabras del alcalde de A Estrada, José López Campos.

En alusión a las críticas efectuadas en fechas recientes por el PSOE de A Estrada, que censuraba invertir en el gimnasio de la piscina climatizada y tener el municipal inservible en vez de ponerlo a disposición de las escuelas deportivas municipales, el regidor local se preguntó si la portavoz socialista, Belén Louzao, quería “poner a hacer pesas a los niños”, algo que “no es lo más adecuado”. Agregó que tampoco tiene en cuenta que las máquinas que hay en el Coto Ferreiro “no son del concello sino de un club de baloncesto, por lo que los demás no pueden utilizarlas. Añadió que cuando esa maquinaria deportiva “estuvo en muchas manos”, “sin control”, hubo que terminar por “controlar el acceso” porque “desapareció mucho material” -aunque el Concello hizo una renovación- y se evidenciaba que no se estaba haciendo “un buen uso” de esos equipamientos. También se preguntó qué ocurriría si se produce “un accidente” cuando alguien está utilizando esas máquinas. Y explicó que, por eso, “se presta en exclusiva” por parte de los clubes “bajo su responsabilidad y supervisión” desde “hace ya tiempo”.

Y es que, remarcó, “no es un gimnasio”. Lo “tienen los clubes” y el Concello “no tiene quien lo organice, gestione y vigile”. En esa situación, el munícipe descarta tener un gimnasio municipal. “No es el objetivo” porque “no tenemos capacidad ni medios” y, así, no se podría prestar a los particulares”. “Un gimnasio así es inviable”, reiteró.

Por el contrario, el máximo mandatario local se muestra muy satisfecho con el que se va a habilitar en las instalaciones de la piscina climatizada con 96.500 euros de aportación municipal.Mientras que para el PSOE eso es censurable, para el alcalde es fruto de una “negociación muy buena” que permitió solventar “los problemas” graves que sufrió la piscina en los últimos años. “Hicimos una muy buena gestión”, aseguró. “Se normalizó la situación” cuando “lo más fácil hubiera sido cerrarla”, indicó. “Había que salvar la piscina climatizada” y el gobierno tuvo que “trabajar y negociar”, subrayó. Así, “se consiguió que la Xunta hiciese una inversión” que ronda los 400.000 euros, agregó, para tener “unas instalaciones de primer nivel” que permitirán “mejorar la prestación del servicio que usan cientos de estradenses”. “Se le van a dar más servicios de los que se estaban dando”, recalcó. “La otra solución sería que cerrase”, dijo, convencido de que no solo “no fue un parche” sino que fue “una solución fantástica”.