Vecinos de la parroquia lalinense de Cristimil denunciaron ayer las dificultades existentes en la parada del autobús escolar donde los estudiantes de la zona embarcan para ir a clase. Al parecer, los baches que rodean la parada situada en el entorno del campo de la feria parroquial hacen difícil que los jóvenes puedan subir al transporte que cada día les lleva y devuelve para cumplir con su jornada escolar. Los vecinos que han dado la voz de alarma sobre esta carencia aseguraban ayer haberse puesto varias veces en contacto con el Concello, pero siempre habían obtenido "la callada por respuesta". El fuerte temporal de los últimos días agravó, además, el mal estado del firme en la parada del autocar escolar de los alumnos de Cristimil.