La Asociación Cultural Vista Alegre de A Bandeira cumple en 2017 35 años de existencia. La antigua escuela laica construida por los emigrantes necesitaba una reparación allá por 1982, y una ayuda del Ministerio de Cultura de 250.000 pesetas hizo posible un sueño del que forma parte Alfredo López Mosquera. Él fue el que en aquellos inicios del colectivo trajo una mesa de televisión y un tablón para que los jueves los jóvenes se acercaran al lugar para jugar y entretenerse en el edificio aún por remodelar. Su vida estará siempre ligada a una asociación cuya sede es todo un emblema de la cultura popular.
-Después de tantos años vinculado a Vista Alegre, ¿en qué consiste su labor actual en el centro?
-Intento coordinar un poco todas las actividades que ponemos en marcha, que no son pocas. Me encargo de los horarios de las actividades, asociaciones, grupos, cursos, profesores, biblioteca, en definitiva coordinar todo lo que pasa en el centro cultural de Vista Alegre. Hay un montón de cosas que hacer.
-¿Cómo se las apaña para controlar lo que se hace en uno de los centros culturales más activos de toda la comarca dezana?
-Todo es fácil si te sabes organizar un poco. Ahora, afortunadamente, tenemos más espacio para hacer cosas, y no es como antes que había que andar esperando unos por los otros para acabar para poder utilizar las pocas aulas que había al principio. Ahora tenemos más espacio y más sitio para poder hacer cosas, y es algo muy necesario porque cada año ofertamos más actividades.
-¿Por qué piensa que Vista Alegre es uno de los grandes aglutinadores culturales de Deza?
-Yo no soy quién para decirlo, pero sí pienso que es uno de los que más hacen por la cultura en la comarca. Es mi modesta opinión, claro. Date cuenta de que aquí tenemos actividades diarias, entre cuatro o cinco cada día, y eso supone un movimiento de gente muy importante. Incluso centros de cabeceras de comarca o de ayuntamientos urbanos y más grandes que el nuestro, a lo mejor no tienen el movimiento que tenemos nosotros aquí, en A Bandeira. Pero todo esto es gracias a la colaboración de la gente. Nosotros podemos organizar e inventar todo lo que queramos, pero si no tenemos gente para las actividades, no haríamos nada de nada. Sin gente es imposible poner en marcha algo tan importante como Vista Alegre.
-También llama la atención esa respuesta importante de los vecinos y, también, de gente que incluso viene de fuera de Silleda.
-Sin duda, unas veces más y otras veces menos. Ten en cuenta que sólo en la sala de exposiciones durante el año pasado creo que hicimos cerca de 14 exposiciones, que son muchas para un año porque tocan a más de una por mes. Siempre contando que A Bandeira es un pueblo pequeño, que nos es un ayuntamiento. De ahí la importancia de que se organicen tantas actividades durante un año en un centro cultural como el nuestro de Vista Alegre.
-Era evidente que el antiguo edificio se iba a quedar pronto pequeño para algo así, ¿no?
-Sin duda, porque el edificio de antes era muy pequeñito. Recuerdo que teníamos un salón de actos para la banda, los dos grupos de baile y el resto de actividades que organizábamos. Además, el inmueble fue la sede social de 14 colectivos distintos del pueblo. Entonces, imagínate un salón y un aula que teníamos arriba y un bar era todo lo que teníamos, porque el resto era biblioteca y una sala que hacía las veces de oficina y, también, de sala de juntas de la asociación.
-¿Le queda mucho para volver a quedarse pequeño?
-Ahora está muy bien. Dentro de poco supongo que se va a inaugurar la última planta que estaba sin rematar. Lo que es la parte nueva son cuatro plantas: El sótano, la primera planta donde está la sala de exposiciones y un aula, la segunda plata tiene biblioteca y ludoteca, y la tercera planta a la que va a ir la ludoteca, y más un local para vestuario. Además de la parte antigua, que queda igual con un salón de actos con más de 100 metros cuadrados, y un aula arriba que con esta reforma también se pudo ampliar.
-¿Tiene pensado hacer algo especial con motivo del 35 aniversario de la fundación de la Asociación Cultural Vista Alegre?
-Supongo que sí, aunque no tenemos aún nada programado para la ocasión. De todas formas, estoy seguro de que algo habrá que hacer para celebrarlo porque creo que la ocasión se lo merece porque pienso que ya unos años, ¿no?
-¿Qué es lo que más le gusta de su trabajo en Vista Alegre?
-A mí lo que siempre me gustó es que en el centro hubiera actividad. Lo que nunca me gustó es que esto esté parado porque sería una muy mala señal para todos. Yo, cuanta más actividad veo, más feliz soy trabajando aquí. Como te decía antes, no es nada sencillo contar con actividades prácticamente todos los días en un sitio como A Bandeira, por eso me llena mucho ver que siempre hay algo que hacer en nuestro centro cultural. De todas formas, también tenemos en A Bandeira un auditorio que tiene mucha vida y con una actividad continua. Allí están desde grupos de baile hasta la banda de música, y demás. No es sólo el centro cultural, es A Bandeira en general porque es un foco cultural muy denso. A lo mejor estoy engañado, pero pienso que es así. Es más, creo que A Bandeira no sólo es importante en el municipio desde el punto de vista cultural, también lo es en toda la provincia. Yo creo que en eso estamos todos de acuerdo.
