Los primeros efectos del temporal en la comarca dezana comienzan a ser visibles. Gran parte del rural se quedó sin suministro eléctrico y las deficiencias en la red de telefonía móvil comenzaron a solventarse a primera hora de la mañana. La Serra do Candán, entre los municipios de Lalín, Silleda y Forcarei, es una de las zonas más afectadas por las fortísimas rachas de viento y el aguacero que hubo durante toda la noche. Un total de siete torretas de alta tensión se desprendieron en O Candán. En la carretera PO-534, en el término municipal de Silleda, los cables de uno de los postes eléctricos desprendidos cayeron sobre una furgoneta, que quedó atrapada.

En Lalín los servicios de emergencias se centraron en el acondicionamiento de decenas de viales del rural, donde cayeron centenares de árboles. Parte del tejado del auditorio municipal se levantó por la fuerza del viento y las clases en el conservatorio serán suspendidas. En uno de los accesos al colegio público Xesús Golmar también se soltaron planchas de la estructura. Este primer balance se salda con tejas caídas, paneles metálicos, y árboles tirados en la calle. En algunos inmuebles se colocaron cintas de seguridad en su perímetro para prevenir posibles accidentes.