En Deza todavía quedan un total de 62 instalaciones conocidas como las viviendas de maestros. En la actualidad la mayoría están deshabitadas y en mal estado, pero alguno de los concellos ya trabajan en planes para su rehabilitación principalmente con un fin social. Otras, sin embargo, todavía pertenecen a la Consellería de Educación y tienen un deterioro considerable.
En la cabecera comarcal hay dos bloques de estos inmuebles en los que residía el personal docente de los centros educativos Xesús Golmar y Manuel Rivero. Llevan muchos años en práctico desuso y sin apenas mantenimiento, lo que provocó que se hayan deteriorado. En total, son 12 las viviendas del bloque del colegio Xesús Golmar y otras 12 en el Manuel Rivero. El gobierno de Lalín tiene como objetivo su rehabilitación para ser destinadas a diversos usos sociales, evitando que su deterioro constituyan un punto de degradación urbano. Recientemente se puso en marcha el taller de empleo del Concello denominado "Rivero Social Lalín, que permitió la contratación de 20 personas desempleadas para llevar a cabo actuaciones de acondicionamiento de seis de estas vivienda de titularidad municipal, que serán destinadas a fines sociales. La brigada de obras ha estado limpiando alguna de estas casas que estaban llenas de excrementos de palomas para empezar cuanto antes los trabajos del taller. La administración local lalinense ha destinado unos 335.000 euros en esta iniciativa.
La rehabilitación del bloque concluirá acogiéndose a uno de los proyectos de la estrategia Lalín Suma 21, que contempla la recuperación del barrio del Manuel Rivero, incluyendo el colegio, pero también el acondicionamiento de las viviendas para el uso social -acogida de familias desestructuradas o sin recursos, mujeres maltratada o espacios para ONG-. De las 12 viviendas que se pretenden arreglar, alrededor de cuatro siempre quedarían disponibles para uso municipal. En la actualidad alguna de las estancias de este bloque ya están ocupada por el Desván municipal y otras asociaciones como O Mencer o el colectivo de amas de casa. De hecho, el Desván será trasladado a las dependencias del Xesús Golmar debido a las obras del taller de empleo. En este caso, las viviendas también se encuentran en un pésimo estado. Actualmente alguna estancia es utilizada por asociaciones, pero el resto está sin uso debido a su deterioro. A este respecto, el Concello no tiene por el momento un plan para su recuperación, aunque aseguran que el objetivo es el de rehabilitar este bloque también.
No obstante, en el municipio lalinense también existen otras viviendas de profesores en distintas parroquias, aunque ninguna de ellas es de carácter municipal. De todas formas, el Concello tiene previsto solicitar su traspaso. . En Prado había cuatro viviendas, pero una parte las acondicionó el anterior gobierno pasando a formar tres. Por su parte, en Vilatuxe también se conservan cuatro casas, pero al igual que las otras en mal estado.
En Silleda ya no quedan viviendas de profesores, segundo apuntan desde el Concello. Las instalaciones que había en la localidad fueron tiradas para construir la guardería que se inauguró en 2011. En A Bandeira tampoco tienen constancia de viviendas de este tipo, solo de una que estaba dentro del recinto y era para el conserje del centro. Por lo tanto, desde la administración local no tiene preparado ningún para ellas. Lo que sí que certifican es que en las zonas de rural muchas de las denominadas casas escuela se han convertido en actuales locales sociales para los vecinos de las parroquias.
Por su parte, en Vila de Cruces se conservan un total de cuatro viviendas junto el CEIP Nosa Señora da Piedade. Ninguna de estas instalaciones es de carácter municipal, puesto que todas pertenecen a la Consellería Una de ellas está actualmente ocupada, pero el resto están vacías. Desde el ente local aseguran que por ahora no hay ningún plan para estas instalaciones, ni tampoco una iniciativa para pedir el traspaso de la Xunta al Concello.
Rodeiro, Agolada y Dozón
En Rodeiro hay 16 viviendas de profesoras, todas ellas ubicadas al lado del CPI. Desde la administración local sospechan que su construcción fue pareja a la del centro escolar, aproximadamente en 1975. De todas las instalaciones, la mitad son de titularidad municipal, cedidas en 2008, y la otra mitad pertenecen al organismo autonómico. De las ocho edificaciones que son de titularidad de la Consellería de Educación, tres están actualmente ocupadas por profesores que imparten clase en el colegio de la localidad, otra está vacía pero según indican desde el ayuntamiento "está óptima para habitar", y el resto muestran un deterioro considerable. En cuanto a las viviendas que pertenecen al Concello, la administración tiene en marcha un proyecto para dinamizar el espacio. El alcalde, Luis López, asegura que la intención es tirarlas para hacer un nuevo acceso al pabellón municipal que está al lado.
Asimismo, en Agolada permanecen aproximadamente una decena de estas casas para profesores, próximas también al CEIP de la localidad. Todas ellas son propiedad de educación, menos una de ellas, que fue cedida al Concello. El ente local tiene intención de solicitar la cesión de las viviendas que todavía son pertenencia de la Xunta para poder, de esta forma, utilizarlas para, entre otras cosas, como alquiler social. Para ello es necesario hacer una entrada nueva, puesto que la existente corresponde al patio del colegio del centro escolar, entonces la intención del ayuntamiento es hacerse con las parcelas contiguas a las viviendas para habilitar por esta zona el acceso. Desde el ejecutivo pretenden guardar una partida del presupuesto del año que viene para efectuar esta actuación. Cabe destacar que técnicos municipales ya están valorando las instalaciones para proceder a un lavado de cara, aunque apuntan que el estado es "razonablemente bueno".
En el Concello de Dozón hay seis de estas instalaciones próximas al CEIP Pío Cabanillas Gallas. Desde la institución local apuntan que varias de ellas están habitadas, por lo que se encuentran en buen estado. La titularidad pertenece al ayuntamiento que realizó algún acondicionamiento para rehabilitarlas como viviendas de particulares.
