Movemento Veciñal Estradense (Móvete) urgió ayer premura para analizar las bonificaciones máximas a las que se pueda optar para reducir el impacto de la regularización catastral en virtud de la cual entrará en vigor el pago del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) para las instalaciones agrarias, naves y alpendres que hasta ahora estaban exentas de este tributo.

Móvete recordó que en el pleno de marzo preguntó cómo iba a afectar el "catastrazo" en el rural estradense y qué tipo de bonificaciones se contemplaban para reducir su impacto. La portavoz de este grupo, Mar Blanco, propuso analizar los tipos de bonificación y llegar al 95% de la cuota íntegra de este IBI en muchos casos.

Tras señalar que este año termina el plazo para efectuar esta regularización, Blanco consideró "fundamental" que el Concello justifique cuanto antes las bonificaciones máximas a las que se puede acoger y ver en qué casos, por tratarse de instalaciones no productivas, podrían estar exentas del impuesto.

Móvete afirmó y criticó que desde la comisión de Hacienda celebrada el pasado mes de abril el gobierno no presentó un estudio con las bonificaciones posibles, de modo que urgió la convocatoria de una nueva sesión de trabajo en la que "la oposición pueda proponer las bonificaciones y aprobarlas antes de finales de año".