Hace más 40 años que la cosechadora llegó al rural para facilitar el trabajo, horas de esfuerzo que se fueron reduciendo en favor de las espaldas de los agricultores. Antes de este avance en la maquinaria agrícola, las labores eran a mano pero los cultivadores, especialmente de trigo y centeno, fueron desarrollando diversas técnicas para realizar una de los trabajos más duros de aquella época. La línea temporal de esas formas de mallar, antes de la llegada de la cosechadora, serán representadas en la parroquia lalinense de Doade, con la Malla Tradicional, que volverá a vestirse de época para la ocasión el próximo 20 de agosto.

En el día de ayer uno de sus impulsores, Manuel Blanco, junto con el concejal de Turismo, Francisco Vilariño, y Maximino Diéguez, colaborador del evento, presentaron la cita en la que la agricultura y la tradición volverán a fusionarse con la misión de "acercar uno de los trabajos más duros en el rural que realizaron nuestros padres y abuelos", aseguró Blanco. Esta décimo séptima edición que espera reunir más de 1.500 asistentes, empezará con una muestra de artesanía popular a las 11.00 horas en el recinto del evento. En ella, se expondrán desde motores de mallar, hasta aventadoras o demás maquinaria antigua. De hecho, uno de los motores que estará expuesto fue fabricado en 1870, "una pieza de las que ya no quedan", según Maximino Diéguez. Tanto Diéguez como Blanco hicieron hizo hincapié en la intención de este tipo de eventos es "enseñar a los más jóvenes, como se vivía no hace mucho tiempo", reconocen que por esa misma razón piden a todo aquel que acuda que vaya vestido de época, puesto que uno de los requisitos que quieren implantar es que para adentrarse al recinto será necesario llevar vestimenta unísona a la malla.

A partir de las 12.00 horas comenzará la recreación de los diferentes tipos de malla que se realizaron, comenzando por malla á pedra, después con males, para finalizar con la utilización de motores, etapa justo anterior a la llegada de la cosechadora. Esta recreación "es la que hace que sea una de las mallas más completas de Galicia, porque recorre todos lo pasos históricos de la malla" aseguró Blanco que considera que también es una de las más grandes en número de asistentes y en vecinos involucrados en la actividad.

Después de la actividad protagonista del evento, se realizará un comida que contará con empanada, carne ao caldeiro, postre, café y pulpeiro. El programa continúa por la tarde con la segunda Ruada da malla, donde ocho agrupaciones musicales realizarán actuaciones de 20 minutos que amenizarán la jornada vespertina. Blanco reconoce que "la intención es que finalmente se haga un serán que culmine con la cena que se celebra tanto para los participantes en la malla como para todos los vecinos".

Por su parte, Francisco Vilariño resaltó que "Lalín puede presumir de un evento de este tipo que está en trámite de ser fiesta de Interés de Interés Turístico Gallego, por su puesto con el aval del Concello". El edil reconoce que el Museo Casa do Patrón tiene también sitio en el plan turístico que está poniendo en marcha la administración local y destaca su gran labor en este tipo de eventos que rememoran y ponen en valor "una actividad que formó parte de nuestros antepasados".