Carlos Fernández, más conocido como "Rufo", lleva más de diez años presidiendo la Peña Ciclista Bikestrada. Tras este periodo el dirigente ha decidido retirarse de la primera línea y dejar paso a nuevas ideas. Se marcha dejando una entidad consolidada, con más de 120 socios.
-¿Cuántos años lleva usted como presidente de Bikestrada?
-Llevo más de diez años al frente del club. Antes estuve también por detrás, sin ser presidente. Bikestrada se constituyó en el año 2003. Antes era Club Ciclista Estradense. Esa entidad se encargaba de organizar las rutas de BTT. Los primeros años el presidente fue José Manuel Fondevila y después ya entré yo. Son muchos años y llega un punto en que es mejor apartarse. No estoy cansado, porque si no ya no estaría ahí, pero es bueno que entre otra gente con otras ideas, un lavado de cara.
-¿Ha cambiado mucho la peña en estos años?
-Mucho, y todo gracias a las rutas populares. La gente que está aquí vino por las rutas, por salir en grupo. Este año, más que nunca, también tenemos gente compitiendo pero esto es algo básicamente lúdico. Nosotros participamos en la subida a los Lagos de Cobadonga desde el año 93. Vas e intentas superar tu tiempo del año anterior pero siempre con un carácter lúdico. Viajamos a muchos sitios pero siempre buscando pasarlo bien y estar un rato con los amigos.
-En materia de socios, ¿fueron aumentando su número?
-El club lo puso en marcha gente como José Manuel Fondevila, Javier Leis, Benigno Carballo... Gente que estábamos en el Club Ciclista Estradense y por un motivo o por otro decidimos formar otro club. Al principio seríamos unos veinte y ahora estamos sobre 120. Luego hay gente que se une a nosotros en las rutas y que no es socia. También está la sección de triatlón. Al final tendremos cerca de 140 personas.
-Y con una estructura consolidada.
-Sí. Un ejemplo es el caso del furgón, que compramos con una subvención que nos dio la diputación. Nos hacía mucha falta porque el que teníamos era muy viejo y no tenía plazas suficientes. El remolque lo fuimos a comprar a Cáceres de segunda mano y lo adaptamos nosotros. El quad que usamos para las rutas era de Fondevila. La verdad es que lo usábamos más nosotros que él, así que decidimos comprárselo por si algún día teníamos algún accidente. A día de hoy el club está totalmente saneado y se sustenta con las cuotas de los socios. Eso es muy importante. Con los veinte euros que pone cada uno al año nos sirve para mantenernos ahí. Otro factor importante es la gran ayuda que siempre recibimos. A todas las puertas a las que llamamos, que no son muchas, nos terminaron echando una mano.
