La oposición municipal de A Estrada coincidió ayer en exigirle públicamente al gobierno que dote a las instalaciones municipales de pararrayos solventes desde un punto de vista técnico.

Mientras que el gobierno local defiende que el pararrayos del Concello funcionó y, por eso, se deterioró la cúpula, el PSOE no ve creíble que funcionase perfectamente y minimizase los daños. Al contrario, cree que si funcionase como debería "año y medio" después de poner de relieve, sus deficiencias "no se habrían producido". Los atribuye a "una negligencia importante". Y se felicita de que no haya más, gracias a que era domingo y no había personal municipal en el Concello ni personas por la calle paseando.

Móvete le pide al alcalde "un poco de humildad en la gestión municipal y que escuche las recomendaciones de los técnicos para actuar con responsabilidad" a fin de que no vuelva a suceder algo similar a lo ocurrido en el futuro. Le pide al alcalde que muestre la documentación que acredite las correspondientes revisiones de mantenimiento de los pararrayos".

Por su parte, el BNG instó ayer al alcalde a hacer una auditoría de todos los pararrayos de los edificios municipales y a exigir a otras administraciones públicas -especialmente colegios e institutos- a hacer lo mismo. "Lo del domingo fue un aviso, no tentemos a la suerte", reclamó el Bloque, acusando a los miembros del equipo de gobierno de "incompetentes".