El portavoz municipal del PP de Lalín, José Crespo, acusa al alcalde de "mentir descarada y deliberadamente" sobre el coste del traslado del avión Phantom cedido por el Ejército del Aire. "Rafael Cuiña sabe que no iba a costar ni un solo euro a los lalinenses", afirma el edil, al tiempo que reconce que el gobierno está en su derecho de rechazar la aeronave "porque no les gusta o, simplemente, porque no la consideran adecuada". "Pero no pueden inventarse argumentos para atacar al PP", reprocha Crespo, a quien le parece "estraña" la "fobia repentina" contra la aviación del PSOE cuando en 2007 pedía una maqueta en madera del Breguett de Joaquín Loriga para el Pazo de Liñares.

El PP niega que fuese a gastar 60.000 euros en el traslado del Phantom, pues tenía el compromiso de cuatro empresarios para sufragar desmontaje, transporte y montaje, entre ellos, Moncho Cuiña, tío del actual regidor y responsable de Metaldeza, que se había comprometido a ensamblarlo y preparar el soporte. Los otros tres son: Andrés Granja, de Formatesa, y Manuel Villanueva, de Villanueva Sistemas Industriales, que cortarían las alas y el timón de cola en Madrid; y Magín, de Grúas Deza, que asumirá el transporte en dos góndolas. El único coste para el que todavía no había patrocinio era el de los materiales para la zapata sobre la que se asentaría el avión.

Por último, el edil popular lamenta la negativa a traer "una joya de la aviación" que "iba a ser un nuevo atractivo" y cuya cesión se había logrado "gracias a la mediación de un militar de Bermés y del general Gallarza". "Pero lo hace porque no le gusta o por sectarismo y revisionismo político, no por una decisión económica", sentencia.