La Consellería de Sanidade asegura que las plazas de fisioterapia del centro de salud de Lalín están cubiertas en su totalidad y que existe un plan asistencial para poner en marcha y mejorar así la atención a los pacientes. Esta es la respuesta inicial de la Xunta a la alerta de Comisiones Obreras por la lista de espera de más de 400 personas en la especialidad de fisioterapia del ambulatorio, que da servicio a los seis municipios de la comarca.
El sindicato desveló anteayer que existen tres profesionales adscritos al servicio, pero solo uno es titular de la plaza. El resto tendrían un vínculo eventual por acumulación de tareas, habiendo por tanto dos plazas vacantes que, incluso están presupuestadas. Además también faltarían tres médicos rehabilitadores y una auxiliar de clínica vinculada al área de fisioterapia de este ambulatorio no tendría cubiertas sus ausencias.
Ante esta denuncia de los representantes de los trabajadores concellos como los de Lalín y Silleda critican la política sanitaria de la administración autonómica en lo que concierne a este caso y, por extensión, a las largas listas de espera. En fisioterapia, aseguró Comisiones, hay pacientes con citas concertadas desde finales de 2014 que todavía no fueron atendidos. El concejal de Sanidade Pública de Lalín, Nicolás González Casares, denuncia el "progresivo desmantelamiento al que se está viendo sometido el centro de salud". Aduce que las más de 400 personas que actualmente están en lista de espera para acceder a la especialidad de fisioterapia son una muestra más de la "absoluta precariedad" en la que están tanto los usuarios como los trabajadores del ambulatorio lalinense. Pide a la Xunta que si no desea poner en marcha el Centro de Alta Resolución (CAR) al menos no elimine más servicios. Recalca que la escasez de recursos humanos en fisioterapia es inaceptable, pero asegura que existen otras plazas que permanecen sin ser cubiertas. Pone como ejemplo las cuatro pendientes en enfermería, además de que Sanidade no sustituye trabajadores y tampoco se estarían cubriendo las jubilaciones, con la consiguiente amortización de empleos. Casares vincula este desmantelamiento de la sanidad pública con el favorecimiento de la privada. Por ello, en nombre del gobierno local, exige al Sergas que cubra de inmediato todas las bajas y vacantes que están pendientes.
El alcalde de Silleda, Manuel Cuiña, lamenta la situación de las listas de espera y dice que no es más que otra muestra del declive de la sanidad pública con los gobiernos del PP. A las listas de espera de esta especialidad en la comarca añade las que se hay en los hospitales para consultas o cirugías. "Más listas de espera y más copagos y menos prestaciones a los ciudadanos, que son, en definitiva, los perjudicados de todos los recortes que el gobierno está practicando", arguye el munícipe trasdezano. Su homólogo cruceño, Jesús Otero Varela, admite que su grupo de gobierno no tiene constancia de quejas entre sus ciudadanos por esta especialidad que deben realizar en el centro de salud de Lalín. En todo caso, manifiesta que no descarta demandar una unidad propia de fisioterapia para el centro de salud local si existiese un censo importante de usuarios.
