Criadores de conejo de la zona centro de Galicia celebraron ayer una reunión en Lalín para perfilar la creación de una asociación de productores. El de la capital dezana fue el último encuentro fijado para esta semana enmarcado en una ronda de reuniones en distintas partes del interior gallego entre las que se incluyeron Lugo, Carballo o Xinzo.

Los criadores confirmaban que la asociación está ya en marcha a falta de realizar un par de reuniones en otras localidades de las Rías Baixas. Hasta el momento estos encuentros han propiciado que cuenten con cuarenta personas interesadas en ser socios aunque "estamos abiertos a contar con todos aquellos productores que estén interesados bien trabajen en solitario o formen parte de cooperativas", matizaban algunos de los presentes en el encuentro de ayer.

La creación de este colectivo tiene como objetivo contar con un órgano que represente al sector y que sirva de interlocutor con la administración o con otros entes implicados para abordar la crisis que atraviesan y que afecta de especial manera a los criadores. "La asociación nace con el objeto de unificar, informar, representar y dar voz ante la administración y ante los socios", apuntaban ayer en Lalín

Esta previsto que la próxima semana se lleve a cabo también una reunión de los socios fundadores del colectivo para elegir la directiva. A lo largo de estos encuentros se han ido nombrando también representantes de cada zona. En la capital dezana se fijaron representantes para O Carballiño, Melide, Arzúa, Catoira además de para la comarca de Deza y Tabeirós -Terra de Montes, zona en la que actuará como tal la rodeirense María Antonia Ramos.

Los encuentros también sirvieron para informar a los cunicultores de los últimos encuentros mantenidos tanto en el Ministerio de Agricultura la semana pasada como esta semana con representantes de la Consellería de Medio Rural. Precisamente en este último consiguieron el compromiso de facilitar la liquidez a los criadores, unas medidas que consideran aún insuficientes. Los criadores, que llevan más de un año sufriendo la caída de los precios reclaman un mayor control sobre las lonjas a quien acusan de agudizar aún más la bajada de los precios. También reclaman medidas para fomentar el consumo de la carne de conejo y la persecución de la utilización de ésta como producto reclamo.