La Asociación Animalista Libera expresó en la mañana de ayer su "satisfacción por el desestimación de la empresa holandesa promotora de la granja de visones que se estaba construyendo en el lugar de Eiriz", en la parroquia de Parada, y vinculó esta "huida a la intensa movilización ciudadana" que tuvo lugar en A Estrada "y también a través de las redes sociales". Los animalistas de Libera aplauden "la espantada de la industria peletera de A Estrada".

Subrayó que hace escasos meses se inició una campaña bajo el lema "Galicia, mejor sin peleteras" que ya ha recabado más de 20.000 apoyos al compromiso #CEROpieles (www.bit.ly/ceropieles) a traés de la que cualquier persona puede mostrar su oposición a la adquisición de productos o complementos elaborados con piel animal.

Señaló que "para los defensores de los animales la salida de la compañía de los Países Bajos también está vinculada al descubrimiento del currículo oculto de la industria peletera". Apuntó que las granjas son "vectores de contaminación ambiental que degradan los suelos en los que se radican con "grandes concentraciones de purines" y también "durante el proceso de conservación del producto", mediante la utilización de "toda clase de productos tóxicos, algunos de ellos calificados como cancerígenos por agencias internacionales".

Agregó que "el caso de A Estrada se remonta a 2014, cuando se inicia la construcción de las naves presumiblemente sin las preceptivas licencias, y beneficiándose una vez más de la laxa normativa autonómica y española que, a pesar de calificar al visón americano como una especia dañina para la biodiversidad autóctona, permite su instalación sin cortapisas ni exigencias adicionales". "Así el 80% de la industria del visón de España se ubica" en Galicia y "su capital tiene cada vez más pinceladas extranjeras, las mismas empresas que salen de otros países en donde se prohíbe este negocio cruel", concluyó.