La presidenta de la Diputación respondió ayer a la petición de reunión por parte de los alcaldes de Cotobade y Cerdedo que tendrá lugar "en el momento en que el organismo provincial tenga que elaborar el informe sobre la fusión".

Carmela Silva recordó que ya en su momento se enteró de la noticia de la fusión de los concellos a través de los medios de comunicación y la foto en la que aparecían los alcaldes de ambos ayuntamientos con el presidente y el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Rueda, respectivamente.

"Durante meses, y a escondidas y detrás de la puerta y con nocturnidad, se fue fabricando una fusión de la que la Diputación no tuvo absolutamente ningún conocimiento", criticó.

"Desde el principio yo planteé que me iba a reunir con los alcaldes y que le correspondía a la Diputación provincial elaborar el informe que tiene realizar según la legislación vigente", indicó.

La presidenta anunció que se sentará a hablar con ambos alcaldes antes de la realización de dicho informe.

"Yo siempre estoy dispuesta a hablar con los alcaldes porque soy represento a una institución que tiene como objetivo tener una relación muy directa con todos los de la provincia", apuntó.

Sin embargo, hizo hincapié en que "no me puede pedir nadie que se le falte al respeto a esta administración".

La socialista se preguntó: "¿Para qué quieren hablar con migo los alcaldes si ya tomaron la decisión y la cerraron con la Xunta? ¿Qué es lo que me quieren presentar?".

Carmela Silva indicó también en los últimos días que la Diputación se suma a pedir a la Xunta que permita una consulta popular en relación a la unión entre ambos municipios. "Los vecinos tienen derecho a opinar sobre su futuro", dijo la dirigente pontevedresa.