Agolada aprobó ayer el reajuste de los gastos de personal presupuestados y que atañen a plazas vacantes y sin amortizar. Un procedimiento por el que es preciso realizar ahora una transferencia de crédito por importe de 65.132 euros que destinan íntegramente a inversiones. La mayor partida es la de 26.323 euros que se fija para realizar mejoras estructurales en el consistorio. En concreto se centrarán en aportar financiación para la instalación del ascensor, pendiente desde hace años y proyectado para este ejercicio. También se incluyen actuaciones en la cubierta del inmueble para atajar problemas de humedades muy palpables en el interior del edificio.

Tras esta aportación, otra de las mayores partidas es la de 17.900 euros para afrontar el pago del IVA del Plan Marco. Con ellas se incluye también una actuación, por importe de 8.000 euros, para mejorar el bombeo en la estación de Ponte Vilariño. También se contemplan 6.909 euros para la adquisición de un pendello que el Concello tiene intención de intercambiar con un propietario para su restauración, en una maniobra planteada ya con anterioridad con el gobierno saliente de la Diputación en el plan de rehabilitación de los inmuebles. Esta cuantía incluye la adquisición de un contenedor de obra acondicionado como vivienda para un vecino del municipio en situación de precariedad. También reservan otros 6.000 euros para financiar los festejos patronales.

Otro de los puntos destacados de la jornada fue la aprobación de la ordenanza municipal sobre la instalación de terrazas hosteleras. El alcalde, Ramiro Varela, puntualizó que hasta el momento carecían de este marco pese a contar con una norma que detallaba las tasas. Señaló, además, que ésta busca "evitar casos como el que ya nos intentaron colar y que no era una terraza sino casi otra vivienda en la plaza". La normativa mantiene las tasas vigentes y añade el marco legal "similar al de otros concellos de la zona". También la oposición se mostró muy receptiva a esta iniciativa alegando que "era una norma que hacía mucha falta", como indicó su portavoz, María Buyo.

La normativa detalla la tramitación que deben seguir las nuevas terrazas, así como las condiciones generales de la instalación, que entre otros aspectos deben estar en armonía con el entorno y dejar al menos 1,50 metros para el paso por la zona, sin ocupar más del 25% de la superficie de la plaza en la que se instalen, así como que sean "fácilmente desmontables". También se incluyen sanciones que abarcan desde los 100 a los 3.000 euros para las infracciones más graves.