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Alertan del abandono del templo de Palio, la Torre de Guimarei y el Pazo de Bergazos

La Asociación Hispania Nostra incluye los inmuebles en su listado estatal de patrimonio amenazado -La iglesia lalinense será restaurada mediante un proyecto de la Xunta

La Asociación Hispania Nostra que trabaja en la defensa del patrimonio cultural y natural de España, incluye en su llamada Lista Roja tres inmuebles de las comarcas. Este listado recoge aquellos elementos del patrimonio histórico que se encuentren amenazados y en riesgo de desaparición, destrucción o alteración de sus valores. En la actualidad, este listado está confeccionado por más de 700 monumentos diseminados por toda España. Los tres que se localizan en las comarcas, se reparten entre A Estrada y Lalín. Se trata de la Torre y Pazo de Guimarei (A Estrada), y los otros dos se ubican en el concello de Lalín: el Pazo de los Gil de Taboada, en Bergazos, y la iglesia de Santa Baia de Palio, que está ya en proceso de ser retirada de este listado tras presentarse un proyecto para su rehabilitación a principios de este año.

La capital dezana es el único municipio gallego que aglutinó dos inmuebles amenazados. En toda Galicia se contabilizan un total de 22, junto a estos tres se suman otros tantos en el resto de la provincia, cuatro más en Ourense, siete en A Coruña y cinco en Lugo.

Los tres emblemas del patrimonio de la zona incluidos en el listado tienen en común encontrarse ya en un avanzado estado de deterioro tras años de abandono. Si bien, cada uno afronta una situación particular. La Torre de Guimarei, el único catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), formaba parte de una antigua fortaleza medieval destruida tras la revuelta de Os Irmandiños. Reconstruida en el siglo XVII, fue objeto de negociaciones entre el Concello y sus propietarios desde la década de los 70. Si bien, en los últimos años el Concello descartó adquirir el inmueble pero se comprometió a apostar por su dinamización.

En la capital dezana, el Pazo de Bergazos, casa fundada a finales del siglo XVI por la familia Gil Taboada acusa el deterioro del paso del tiempo. El azote de los inviernos ha provocado ya el derrumbe de varias partes de la casona.

Mientras, la iglesia de Palio, que data del siglo XIII es el único que tiene comprometido ya un futuro más esperanzador. En los últimos meses la Consellería de Cultura anunció que llevaría a cabo un proyecto de restauración del inmueble con un presupuesto de 190.000 euros. Ya en 2005 el Concello había levantado una estructura para intentar mermar la afección del templo a la espera de una restauración integral y adecuada.

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