Casi dos meses después del inicio de las obras en el colegio público de Rodeiro los trabajos están aún por finalizar. La actuación en el centro educativo tenía como objetivo actuar sobre algunos de los puntos más afectados por humedades. En concreto, se centraba en el patio interior y en la zona de acceso al inmueble. Las obras también incluían la sustitución de los canalones de la zona del comedor. Los trabajos comprendían la colocación de placas aislantes en la fachada que además de reducir las humedades en el edificio propiciaría una mejora en el aislamiento térmico, con un ahorro en calefacción, y mejoras en la insonorización del mismo, tal y como apuntaba en su momento el regidor, Luis López.

Las obras se iniciaron coincidiendo con el comienzo de las vacaciones navideñas y se centraron, en un principio, en la zona de acceso, para evitar entorpecer el ritmo de las clases si no conseguían rematarse a tiempo. Precisamente, tanto López como desde la directiva del centro, apuntaban ayer que las obras están casi finalizadas, a falta de pequeños remates que estiman podrían solventarse en un par de días. Así el regidor confirmó que en este mes quedarían finalizados dichos trabajos. López apuntaba que la meteorología adversas de estos meses ha condicionado el ritmo de estas labores en el exterior del inmueble.

La actuación en el centro, con un presupuesto de 20.000 euros con cargo a la Diputación, ha servido para hacer frente a una de las zonas más afectadas por humedades en el inmueble, pero "solo es un pequeño parche", apuntaban desde la dirección del colegio, ya que el centro aqueja deficiencias en buena parte de sus fachadas. Indican que sería necesario aplicar el mismo tratamiento a toda la fachada en la que se ha cometido esta primera fase.