En 2010 trascendieron los primeros movimientos de la empresa con particulares de Lalín para buscar una parcela en las que abrir su nuevo supermercado. Inicialmente entre las cuatro o cinco localizaciones, admitidas por la compañía, que se pusieron encima de la mesa estaba una propiedad de A Corredoira, en los últimos días han vuelto a saltar a la palestra posibles acercamientos hacia Mercadona por parte de estos vecinos. Pero la compañía alega que "en principio" su único objetivo es A Trigueiriza.

La parcela comercial resultante, dentro de un área de reparto que abarca más de cuatro hectáreas, ofrece una ocupación máxima del 70% y permite la construcción de un centro comercial de hasta dos plantas con una altura a la cornisa inferior a nueve metros. En principio, la propuesta de Mercadona pasa por la creación de un hipermercado con un espacio de 1.500 m2 de venta al público, con el mismo formato que todos los que tiene en España, aunque precisará una mayor superficie para el almacén. En cuanto a los espacios libres de ese solar comercial, podrán dedicarse a un aparcamiento vinculado al su condiciones que exigía la empresa con el propósito de dar mayor comodidad a sus clientes para hacer su compra.