Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Bienes empresariales

El mercado industrial de ocasión

Naves de empresas de las comarcas quebradas por la crisis están a la venta entre 40.000 euros y más de dos millones -La mayor parte de estas dependencias son comercializadas por inmobiliarias o por entidades bancarias

Las dependencias de la constructora lalinense Proinsa las vende una inmobiliaria en 682.000 euros.

La caída de la demanda y el exceso de oferta hicieron tambalear a gran parte de las promotoras de Deza y Tabeirós, que hasta que estalló la burbuja inmobiliaria habían levantado millares de viviendas, sobre todo en los municipios de mayor entidad. La crisis económica supuso un golpe casi irreversible para muchas de estas empresas, pero también se llevó por delante a otras vinculadas al sector del ladrillo o de las infraestructuras. El textil, otrora clave en el empleo en villas como Lalín, también se vio envuelto en un terremoto que llevó a la quiebra a varias compañías y solo aguantaron las de mayor fortaleza o las que fueron capaces de ajustar su producción para competir en un mercado globalizado.

El resultado de esta crisis brutal son centenares de vecinos en la calle y empresarios despojados de recursos y bienes que en casos habían conseguido tras muchos años de profesión. Pero otro de los resultados de los años más duros todavía es visible. Quedan las sedes de aquellas empresas que perdieron su patrimonio y que en la mayor parte de los casos pasó a manos de las entidades financieras. Ahora, muchas de estas factorías están de nuevo en el mercado, pero para ser comercializadas como naves de segunda mano. Entre otras están las antiguas naves de la conocida empresa textil lalinense Montoto, que acumulan al menos tres subastas fallidas en un juzgado. Ubicadas en el parque empresarial Lalín 2000, sus dueños habían invertido en ellas unos 16 millones de euros y, ahora libre de cargas, pero también de su moderna maquinaria, ocupan más de 17.000 m2. En el mismo recinto hay naves accesibles, como una de 360m2 que está a la venta en 190.000 euros. Cerca de este recinto industrial se encuentra la antigua sede de la constructora local Proinsa. Una inmobiliaria comercializa el inmueble, de 508 metros, por 682.000 euros. Consta de almacén en sótano y tres plantas habilitadas como oficinas. En el principal polígono de la comarca también se comercializa un puñado de naves, pero en este caso no se trata de bienes de entidades crediticias, sino de propietarios que desean deshacerse de ellas.

En el polígono de Botos siguen a la venta las naves de Industrias González, que pertenecen a un banco. Si hace poco más de un año su precio de salida había sido de 1,1 millón de euros, la oferta actual está en 849.000. La entidad financiera aplicó una rebaja del 25% a unas instalaciones de dos naves y terreno que suman casi 6.000 metros cuadrados. Cerca está también en el mercado la vieja nave de la textil Enmanuel, por 180.300 euros, y con 1.348 m2 de superficie. Otra, por 1,5 millones, también en Botos, ocupa 5.500 m2 sobre una parcela de 14.000.

No solo Lalín capitaliza el sector inmobiliario de naves a la venta. En Silleda la sociedad metalúrgica, también quebrada, Cometal había levantado unas modernas instalaciones en la segunda fase del polígono Área-33. Una comercializadora la tiene en venta por 2,2 millones de euros, justo la mitad de su tasación inicial. La nave está asentada sobre una parcela de casi 20.200 metros, de las que edificados son 7.900. En el polígono de Silleda y en el de Lalín existen predios en venta o alquiler por parte de Xestur, pero también de particulares. Un terreno, de 15.427 metros cuadrados, se comercializa por 750.000 euros.

En este mercado de naves e instalaciones industriales de las comarcas también existen ofertas para inmuebles de menor dimensión. En Ancorados (A Estrada) las hay de 1.200 m2 por poco más de 100.000 euros. Otros de los productos que se pueden encontrar son antiguas explotaciones ganaderas en la que sus propietarios abandonaron el negocio o no fueron capaces de remontar. En Lalín hay casos de instalaciones de 1.500 metros con naves auxiliares por 79.700 euros.

Algunas de las naves más representativas de las comarcas llevan años sin encontrar comprador y sin salida, pese a que sus cotizaciones actuales están por debajo de la mitad del valor de mercado. Si nos ceñimos a pisos, en las comarcas se pueden encontrar centenares, incluso promociones enteras de bloques de viviendas a estrenar.

Compartir el artículo

stats