El municipio de Silleda pierde población por quinto año consecutivo y está ya muy lejos de los 10.000 habitantes a los que aspiraba hace poco más de un lustro. El último dato oficial cifra en 8.772 las personas empadronadas en Trasdeza y corresponde al 1 de enero de 2015. Son 194 residentes menos que un año antes, lo que se traduce en un descenso del 2,1%. La caída se ha agudizado con respecto al ejercicio precedente, cuando se habían constatado 71 vecinos menos. Un total de 28 parroquias ven mermar su población (24 en 2014), 4 crecen (7) y Carboeiro se mantiene.
El decrecimiento demográfico castiga tanto al rural como a los dos núcleos urbanos, que en los últimos años venían mostrando un comportamiento. La localidad que alberga la capital municipal cede 23 empadronados (0,7%) y se queda en 2.950, mientras que la parroquia homónima a la que pertenece baja 34 (1%), hasta los 3.172 vecinos, tal como recoge el Nomenclátor que elabora el Instituto Nacional de Estadística (INE). El otro casco urbano, A Bandeira, volvió a subir ligeramente y si en 2014 había ganado cuatro personas, un año después añade tres y sitúa su censo en 757, núcleo central de la feligresía de Manduas, que sigue por encima del millar (1.004) pese a ceder dos.
La tercera parroquia más poblada, tras Silleda y Manduas, es Escuadro, con 444 censados, mientras que la más pequeña es Pazos, con 41. Y la que más decrece es Taboada, pues ve esfumarse prácticamente la décima parte de su censo: Inició 2015 con 21 habitantes menos, que equivale a un descenso del 9,8%. En segundo lugar aparecen O Castro, con una caída del 8,1%, al quedarse sin 8 vecinos, y Graba, con un 7%, al recortar 17. Cortegada pierde 13 residentes por segundo año consecutivo, lo que supone un 5,6%, igual que Siador, al bajar 7. Laro retrocede una docena (4%), que se suma a los once del año anterior, si bien mantiene el núcleo rural más poblado, Freixeiro (94). Las cuatro parroquias que crecen son Dornelas -que ya lo hizo el otro año-, Parada, Cervaña y Saídres.
El número de aldeas con menos de diez habitantes y, por tanto, en riesgo de desaparición se eleva a 50. A esta lista se incorporan Costoia (Fiestras), Ferrozos (Manduas), San Martiño (Negreiros), Quintás (Pazos) y Fonteboa (Silleda), mientras que la abandona Pena do Camiño (Oleiros). También hay que descontar Regueira (Taboada), que se quedó sin los tres habitantes que tenía un año atrás y deja en diez las aldeas despobladas; las otras son: A Braña (Cira), Segade (Cortegada), Marín (Fiestras), Crestelle (Manduas), Freixeiro (Parada), Cartimil, Currelo -añadida en 2014- y Outeiro (Siador) y Reigosa (Xestoso).
