Crespo aprovechó su comparecencia de ayer para atacar al grupo de gobierno por cómo está manejando la peatonalización y también hizo referencia al conflcito abierto con los taxistas por el cambio de la parada de Praza da Torre a Colón. El concejal dijo que llevará al próximo pleno una iniciativa que propicie el debate acerca del proyecto municipal, pues entiende que no se está llevando con consenso y existe una posición mayoritaria en contra de comerciantes. Dijo que él, como alcalde, estuvo y está ahora a favor de la humanización del centro y por eso se adecuaron estas calles. "Lo más fácil ahora es solo cerrarlas, cuando las obras ya están hechas". En todo caso aludió a que años atrás trató de cerrar Principal y Loriga y, tras una reunión con comerciantes y una posterior visita al casco antiguo de Ourense, aparcó esta medida al estar el 85% de los negocios en contra. Cree que ahora, lejos de lo que asegura el alcalde, Rafael Cuiña, tampoco hay más voces a favor que en contra del cierre de estas dos calles. Sobre el exitoso corte de Rosalía de Castro en verano indicó que esta idea también se había llevado a cabo años atrás los fines de semana con conciertos a pie de calle.

Sobre la polémica de los taxistas con el grupo de gobierno, que acusó al PP de estar detrás de esta campaña, pidió a Cuiña prudencia en sus aseveraciones, una vez que, dijo, si su partido realizase una recogida de firmas contra el traslado de la parada o la peatonalización "seguro que algunas más de 300 recogeríamos". Pidió al alcalde diálogo con este gremio y que aparcase "su orgullo" para tratar de llegar a un acuerdo con los taxistas. "Al menos hay que escucharlos, aunque luego toque gobernar", dijo. También citó que durante sus mandatos previó llevar la parada de Praza da Torre exactamente el mismo sitio de Colón, pero se echó atrás por no contar con la aprobación de estos profesionales.