"Es una decisión suya y de su grupo municipal". Con estas palabras valoraba ayer el secretario comarcal del PP, José Crespo, la incomparecencia de sus correligionarios en el Concello de Dozón el pasado viernes con motivo del pleno extraordinario que había solicitado el BNG para demandar explicaciones sobre las detenciones del alcalde, Adolfo Campos Panadeiros, y de su hijo y teniente de alcalde, Adolfo Campos Vázquez, en noviembre del año pasado dentro de la Operación Qatedra, que investiga un supuesto fraude en cursos de formación.

Interrogado sobre esta cuestión, Crespo se limitó a recordar que el regidor de Dozón ya pidió en su momento la baja voluntaria en el PP, "y para nosotros es respetable". "Los rifirrafes entre grupos políticos de Dozón tendrán que aclararlos ellos", apostilló el responsable de los populares dezanos, que enmarcó lo sucedido en la "vida doméstica" y defendió el "derecho" de sus colegas a "hacer lo que les parezca mejor". El exalcalde lalinense aludió también a las sobradísimas mayorías absolutas conquistadas por Adolfo Campos durante su dilatada trayectoria municipal.