El personal municipal del Concello de Silleda continuó durante la jornada de ayer realizando reparaciones de los diversos daños provocados por los temporales de los últimos días. Destacan las averías en el alumbrado público, los árboles caídos o los desprendimientos de tierra en el rural, mientras la caída de planchas de madera de la fachada del centro de salud ha sido uno de los problemas en el núcleo urbano de la capital municipal.

El desprendimiento de elementos de la fachada principal del edificio sanitario de Silleda no es nuevo, sino que ya se ha producido con ocasión de tormentas anteriores, sin que hasta la fecha haya habido que lamentar daños personales. Esta vez fueron tres las placas de madera que cayeron sobre la acera como consecuencia de las tormentas de viento y lluvia. Los operarios volvieron a colocarlas ayer en su sitio con ayuda de una plataforma elevadora, sin que la actividad propia del inmueble se viese afectada.

Desde el Concello se procedió también a la reparación de numerosas averías registradas en el alumbrado público. Debido a las tormentas del fin de semana y del lunes, se produjeron "muchas averías, sobre todo en el rural", indica el concejal Klaus Brey, que especifica que alguna parroquia se quedó sin servicio en casi todos sus lugares. "Aprovechando que la meteorología nos dio un respiro, el departamento de electricidad se centró hoy (por ayer) en arreglar estos desperfectos en el rural", expone el responsable de Obras, Servicios y Medio Ambiente. Entre las parroquias que sufrieron incidencias destacan Cervaña, que se vio afectada en su práctica totalidad y de la que ayer se atendieron tres o cuatro avisos de otros tantos vecinos en el consistorio; Graba, en donde el repetidor de televisión digital (TDT) dejó de funcionar el lunes durante un tiempo al saltar los automáticos de su cuadro de alimentación; Piñeiro o Vilar.

La retirada de árboles caídos o los desprendimientos de tierra en vías públicas fueron otras de las incidencias atendidas, así como desperfectos en calzadas -por formación de baches- en lugares como la Avenida do Recinto Feiral. "Trataremos de solventar estas incidencias en el menor plazo de tiempo posible", declara Brey.

La otra cara de las inclemencias meteorológicas es la que ofrece la Fervenza do Toxa, que incluso ha visto incrementado su atractivo turístico. Y es que este enclave de Pazos sigue atrayendo a vecinos y visitantes que no quieren perderse el espectáculo que ofrece estos días la caída de agua más alta de Galicia.