El gobierno de Lalín lleva al pleno de esta mañana una propuesta para que la Malla Tradicional de Codeseda (Doade) sea declarada como Festa de Galicia de Interese Turístico. En caso de que la iniciativa sea aprobada se cumplirá uno de los trámites necesarios para que el evento obtenga este reconocimiento, una vez que, si bien la iniciativa parte de la Asociación Amigos Casa do Patrón, es necesario el respaldo plenario del ayuntamiento en el que tiene lugar. Así después será la Xunta la encargada de aprobar la petición, organismo que tiene la competencia.

El concejal de Turismo, Francisco Vilariño, resalta la importancia que tendría lograr la catalogación de la "Malla de Doade". El edil señala que por un lado permitiría poner en valor una de las iniciativas más singulares que hay en el municipio y que cada vez es capaz de atraer a más público a Lalín. Asimismo, Vilariño añade que "la declaración" permitiría mejorar el aprovechamiento del potencial turístico de esta celebración con los consiguientes beneficios para la promoción del término municipal. También expone que en caso de que sea declarada Festa de Galicia de Interese Turístico, el reconocimiento contribuiría a dinamizar una cita que también tiene otro importante componente etnográfico al apostar tanto por la recuperación de una forma de trabajo comunitario y tradicional en el campo gallego que en caso contrario podría desaparecer para siempre.

La Malla Tradicional de Codeseda se celebra ininterrumpidamente en los últimos 16 años a finales del mes de agosto y es la más completa de las que tienen lugar en la geografía gallega. Es la única que recrea todas las modalidades de las antiguas mallas de la comarca dezana. En su recreación participan habitualmente más de 70 personas de 11 parroquias de Lalín, sobre todo de las de Doade, Zobra, Cercio y los vecinos del propio lugar de Codeseda. Este evento etnográfico constituye para el grupo de gobierno un modelo de trabajo comunitario que representa una tradición singular y que supone la total participación y colaboración de varios lugares en una actividad en la que se antaño se implicaba toda la población del entorno.

La celebración del pasado año tuvo lugar el 22 de agosto. Como es habitual se escenificaron las tres formas de realizar esta tarea: á pedra, con males y con un motor diésel, que en esta ocasión fue una máquina de 1930. La jornada festiva contó también con puestos de artesanía y la música tradicional en un evento que cada año convoca a centenares de vecinos y visitantes en esta aldea de la parroquia lalinense de Doade, en la que se asienta el museo etnográfico Casa do Patrón.