A un mes de que comiencen las celebraciones de Navidades, la administración local ya hace números para saber cuánto le costará la ambientación de las calles con el alumbrado típico de estas fechas. En líneas generales, los seis municipios de la comarca logran contener el gasto en relación a años anteriores, y es Lalín el único que aplica una rebaja de consideración. Desde el departamento de Comercio, que encabeza Katia Procino, se señala que se gastarán 11.495 euros, es decir, en torno a 3.500 euros menos que el año pasado. Y si bien en 2014 se habían reducido los arcos y demás elementos decorativos (eran 100, una decena menos que el año precedente), esta vez se incorporarán justo una docena más, para volver a moverse en los niveles de 2013. La decoración se instalará en las mismas calles del año pasado, y el encendido no será justo cuando comience diciembre, sino una vez que pase el puente festivo de la Constitución.
En cuanto a Silleda, el presupuesto que se maneja es similar al de las pasadas Navidades, en torno a 5.000 euros. Los arcos y demás elementos decorativos se colocarán en los cruces principales de las calles de los cascos de Silleda y A Bandeira con la N-525, así como en las rúas más transitadas, en enclaves como la Praza do Siñor Afranio e incluso en algún edificio público. Comenzarán a lucir a mediados del mes que viene. Hay que recordar que la cada vez mejor situación financiera de Silleda permite una partida también cada vez mayor para estos gastos conforme pasan los años. En 2012, y debido a la política de austeridad que tenía que aplicarse por entonces para hacer frente a deudas de legislaturas anteriores, el alumbrado de Navidad fue costeado no por el ejecutivo local, sino por los colectivos Amigos da Empanada y Olaia.
Vila de Cruces, por su parte, destina de nuevo unos 3.500 euros a adornar el casco urbano del municipio. Los arcos se colocarán a principios de mes para encenderse a partir del 11 de diciembre, "aunque en años de bonanza ya se lucía desde unas jornadas antes", admite el edil de Comercio, José Luis Villaverde Gestal. Las luces adornarán todas las calles del casco urbano. Hay que recordar que el año pasado los comerciantes disponían de una cuantía de dinero cedida desde el concello para organizar algún sorteo, pero prefirieron destinarlo a ambientar las calles con decoración navideña.
Por último, los tres municipios menores de Deza muestran distintas soluciones. Rodeiro destina al alumbrado navideño 2.500 euros. Se trata de arcos neutrales puesto que serán utilizados también para las fiestas de San Vicente, que tendrán lugar a mediados de enero. Desde 2011, y con el regreso del PP al gobierno local, "aplicamos un control del gasto" en relación a los años del bipartito, apunta el alcalde, Luis López. Se desconoce cuándo comenzará a funcionar el alumbrado en el casco de Camba. Agolada y Dozón, un año más, carecerán de alumbrado navideño ya que ambos concellos están sometidos a un plan de ajuste que les impide invertir en gastos superfluos. En el casco de Agolada, la colocación de la decoración de estas fiestas suponía un desembolso de entre 3.000 y 5.000 euros. Agolada ya no coloca alumbrado desde 2012, y Dozón desde 2013.
