"Respecto a las cifras de asistencia, desde hace 20 años, nadie tuvo el coraje para decir las verdades al final de la feria". Son palabras, ayer, del presidente de la Asociación de Fabricantes e Comerciantes de Mobles de A Estrada, Gonzalo Figueiras, después de que el comité ejecutivo de la Fundación de Exposicións e Congresos, entidad organizadora de la Feira do Moble de Galicia, anunciase su intención de realizar en los próximos días una consulta al empresariado estradense del mueble tendente a analizar cómo podrían reflotarse las últimas cifras de afluencia a un certamen sectorial que viene celebrándose en el municipio estradense desde hace tres décadas.
El hecho de que la popularmente conocida como Fundación do Moble haya reconocido tras la última edición de la feria un descenso en el número de visitantes al recinto ferial entra en contraste con una tendencia que el presidente de los mueblistas de A Estrada acusó ayer sin paños calientes.
Figueiras se mostró claro y contundente a la hora dejar entrever que en los últimos años -en concreto se refirió a las dos últimas décadas- se arrastró una tendencia a elevar las cifras de afluencia en el momento de realizar balance público del resultado de las sucesivas ferias, asegurando que los datos facilitados no casan con el volumen real de público que visitaba este gran escaparate para el sector. "Nunca hubo la que se dijo", sostuvo sin miramientos Gonzalo Figueiras. Continuó apuntando que él siempre procuró en el seno del patronato de la fundación buscar que se hiciesen públicos los datos reales de afluencia. "Hay que ser realistas", incidió el también presidente de la Asociación Comarcal de Empresarios (ACE), que consideró que dar impulso a la Feira do Moble es una tarea que ha de implicar por igual a los empresarios del mueble, la fundación y las administraciones. "Tenemos que mojarnos todos", sostuvo.
En este contexto, Figueiras se mostró convencido de que la caída de público que, con respecto al año pasado, reconoce la gerencia de Nemesio Rey, no ha de entenderse como algo propio de esta última edición de la Feira do Moble de Galicia sino como una realidad que se arrastra -dijo- desde hace "seis o siete años". "No hay más que ver las cifras de hace unos seis años", invitó. A la hora de encontrar motivos que ayuden a explicar esta reducción de la afluencia, el presidente de los mueblistas locales apuntó al impacto de la crisis económica, aunque no dejó de reconocer: "los expositores también tenemos nuestra culpa". En todo caso, el industrial aprovechó ayer la ocasión para recordar que en puntos como Valencia o Madrid se apostó por cancelar la celebración de eventos feriales vinculados al sector del mueble mientras que en A Estrada se ha aguando el tirón en unos años especialmente complicados para esta industria, una de las más importantes del tejido económico local.
Figueiras aplaudió la intención de la Fundación de Exposicións e Congresos de consensuar con todo el sector local los cambios que podrían introducirse en el certamen para reaccionar ante la caída de público. "El sector se tiene que sentar con las personas que organizan e intentar recuperar al máximo la asistencia", dijo el presidente de este colectivo de empresarios. Abogó por trabajar en la organización de cada convocatoria desde el día siguiente a la clausura de cada edición. Reconoce la responsabilidad del sector a la hora de presentar iniciativas que busquen una mejoría en la feria, si bien incidió en que el verdadero interés de estos empresarios es vender, no solo conformar un gran escaparate.
A la hora de referirse a las cuestiones que considera claves para el futuro impulso de la Feira do Moble, el presidente de la asociación de mueblistas de A Estrada señaló que resulta crucial que se incremente el consumo. "Lo demás es perder el tiempo", dijo, si bien no dejó de reconocer que "parece que empieza a despegar" un poco la situación. Además, incide en que hay que ir presentado a través de estos eventos feriales "cosas nuevas y que la gente demanda". En este sentido, subrayó Figueiras que hoy día "en cualquier gran superficie se venden muebles". "Hay que caracterizarse por mantener la calidad y el servicio", dijo al referirse a la industria local.
