Después de que el BNG se quejase de la ejecución de las obras de la acera en la Rúa 24, más conocida como cuesta de la iglesia, señalando que su diseño impide su normal utilización para personas con movilidad reducida -al impedir el paso de una silla de ruedas- el alcalde José López Campos indicó ayer que la acera se diseñó como indicaron los técnicos. No obstante, admitió que en algunos puntos la acera presenta un desnivel que intenta solucionar un "problema grave" que existe en ese tramo: el gran desnivel que hay entre la rasante de la calle y la entrada a garajes, por ejemplo. Explicó que la acera es de 2,50 metros, un ancho que consideró idóneo e hizo notar que lleva una parte de "pendiente estable" y "otra de transición" hacia los garajes.

En cuanto a las quejas del Bloque respecto de que Benito Vigo lleve dos semanas "levantada" donde hubo la avería de la traída, López indicó que supone que aun debe estar pendiente alguna actuación en ese punto.