El Taller de Empleo de A Estrada se ha puesto manos a la obra para reformar la robleda municipal, una importante bolsa de zona verde situada en las inmediaciones de la zona deportiva y de institutos. Este espacio busca superar el estado de semiabandono de los últimos años para convertirse en el área de ocio y esparcimiento antaño considerado punto de encuentro para muchos ciudadanos. Las obras acaban de iniciarse y, en base a las previsiones recogidas en el proyecto de la actuación, se centrarán en una superficie que alcanza los 28.000 metros cuadrados.

El módulo forestal del "obradoiro" dividió a sus alumnos-trabajadores en dos grupos, de tal manera que unos realizarán la obra de la robleda y otros comenzaron a trabajar en el proyecto de la Fervenza de Callobre. La inversión programada para la zona verde incluida en la malla urbana de A Estrada asciende a 30.000 euros. En la jornada de ayer los trabajadores se afanaron en las labores de recuperación de los diferentes manantiales existentes en la zona y que nutren una fuente provista de una inscripción que data su colocación en el año 1983.

El alcalde estradense, José López, explicó que estos manantiales acaban desembocando en un estanque existente en el recinto del IES Nº1. El munícipe no pudo concretar si finalmente se realizará en la robleda una especie de estanque para recoger las aguas de estos nacientes, si bien los trabajos que ayer se hacían en la robleda parecen indicar que sí se apostará por esta solución.

De igual modo, el Taller de Empleo comenzó ya con la recuperación paisajística de la robleda. La actuación contempla la creación de "terrazas" mediante la construcción de muretes de contención de mampostería para crear superficies planas que salven la pendiente existente en la actualidad y en las que ubicar mesas y parrillas para barbacoas. Se colocará también nuevo material urbano.

En su momento desde el Concello se trasladó la intención de sumar a esta reforma el acondicionamiento de una finca anexa a la carballeira de titularidad municipal. Así, aprovechando la red de senderos interiores de este espacio y el vial que lo circunda, esta importante zona verde quedaría conectada con el parque exterior de reciente construcción y de 45.000 metros cuadrados mediante una senda peatonal.

La recuperación de este entorno para el ocio y esparcimiento de los estradenses permite afianzar la apuesta por la creación de zonas verdes descentralizadas en el casco urbano, teniendo en cuenta que el principal "pulmón" de la villa -la alameda municipal- se queda pequeño y todavía no se logrado su ansiada expansión.

Fervenza de Callobre

En otro orden de cosas, el Taller de Empleo emprendió también la obra en la Fervenza de Callobre, zona en la que se buscará propiciar una recuperación de los márgenes del río para aprovechar su valor paisajístico, ecológico y turístico. Esta puesta en valor de la zona se completará, explicó ayer López Campos, de una segunda fase. Y es que el Concello anunció su intención de apoyar las aportaciones realizadas por una asociación de Callobre que pidió completar esta obra con la creación de una ruta de senderismo homologada.

El regidor local explicó que en estos momentos los trabajos se están procurando el acondicionamiento de los accesos al río. Indicó que la actuación es completará en el algunos puntos con la colocación de puentes de madera para salvar el curso fluvial, dotación que luego se integrará en la senda que se habilite.

Estos alumnos-trabajadores tienen también programada en su plan de obra una reforma en el entorno del Picho de Curantes, otro de los atractivos turísticos de A Estrada de gran valor paisajístico y medioambiental.