El Pazo de Liñares tendrá un espacio dedicado a Joaquín Loriga, pionero de la aviación nacido a quien vieron nacer sus muros. En este sentido trabaja el gobierno de José Crespo, que subraya la importancia de la efeméride que ayer se cumplió: El 87º aniversario del aterrizaje de Loriga en el campo de O Toxo. En efecto, fue el 23 de junio de 1927 cuando el aviador lalinense, tras realizar el histórico raid Madrid-Manila y aceptando una invitación de sus paisanos, despegaba desde Monforte en dirección a Lalín, en donde tomaba tierra en torno a las 10.30 horas. Lo aguardaba un gentío de miles de personas que rodearon al as al pie del avión, entre quienes estaba su padre y coronel de Artillería, Eliseo Loriga Parra. Trasladado en el coche del gobernador a Lalín, Loriga pronunció palabras de agradecimiento. El programa terminó con una exhibición aérea hacia las 18 horas. El piloto fallecería poco después, el 18 de julio, en el fatídico accidente del aeródromo de Cuatro Vientos.