El ayuntamiento contará con una veintena de operarios durante seis meses. A la veintena del plan de empleo de la Diputación se sumarán otros 10 financiados por la Xunta entre perceptores de la Renda de Integración Social de Galicia (Risga). Una vez que el Gobierno central impide realizar contrataciones a las corporaciones locales, el Concello aprovechará esta mano de obra, al tiempo que reestructurará el funcionamiento interno de algunos departamentos. El alcalde reconoció que la normativa estatal coarta las posibilidades de activar servicios -está sin cubrir la de conductor de motoniveladora y técnico informático del aula Cemit-, pero ello no condiciona la puesta en marcha de una brigada de intervención urgente para atender eventualidades como las provocadas por siniestros de tráfico en mobiliario y bienes públicos y otras incidencias. El funcionario de inspección de obra, José Couto Codeseira será el encargado de coordinar un servicio que contará con tres operarios y el furgón usado como ambulancia años atrás.

Al frente de inspección de obras continuará Plácido Rozas, mientras que Ramón Galego se responsabilizará del parque de vehículos y será el nuevo capataz de obras. Tanto Galego como Couto seguirán como inspectores.

Campo sintético

Por otro lado, el registro del consistorio mantendrá su horario de apertura por las tardes -de 15.00 a 20.00- pero el edificio no estará abierto y será necesario llamar al timbre para ser atendido. Crespo además anunció la adjudicación del césped artificial del Cortizo a a la empresa Mondo.