En plena polémica por la ley Gallardón y su propuesta de concentrar todos los partidos judiciales del norte de la provincia en la ciudad de Pontevedra, los datos sobre el rendimiento del Juzgado Número 1 de Lalín ponen en evidencia la necesidad de o bien un juzgado paralelo o bien una reordenación de las tareas en su plantilla, un consejo que ya le ha hecho el Consejo General del Poder Judicial en más de una ocasión.

Esta sala cerró el primer trimestre del año con 1.566 sentencias civiles pendientes de ejecución, 13 más de las que tenía al cierre de 2013 y casi 200 por encima de las 1.377 con que terminó el primer trimestre del año pasado. Dentro de la categoría de ejecuciones civiles entran tanto procesos relativos al derecho de familia (con 35 asuntos pendientes, los mismos que había al término de 2013), como ejecuciones hipotecarias (114) y otros títulos no procesales (283). El grueso de estos fallos pendientes se integra en el capítulo de restantes procesos civiles, con 1.133 asuntos sin cerrar.

De igual modo, la carga de trabajo que soporta este juzgado también es muy notable en cuanto a los escritos pendientes de proveer. Proveer un escrito significa dar salida a un asunto, ya sea de forma definitiva (con sentencias) o provisional (con autos o providencias, que se emiten durante la tramitación del caso). Pues bien, el primer trimestre termina con 635 escritos pendientes, de los que 114 están en trámite y 521 en ejecución. Para darnos una idea del atasco de esta sala, basta con ver que de estos escritos pendientes, 463 (es decir el 72%) tienen una antigüedad superior a los 30 días.

Derecho de familia

El juzgado consigue frenar más su colapso en otras cuestiones como los asuntos vinculados al derecho de familia. A finales de marzo, estaban pendientes 31 casos, sólo cinco más que en diciembre. La mayoría, en concreto 22 juicios, se refieren a divorcios no consensuados y que ya estaban pendientes en el trimestre anterior. También están pendientes 3 juicios sobre la capacidad de las personas, 2 sobre modificación de medidas, uno sobre un divorcio consensuados y otros 2 clasificados como "resto de incidentes". En cuanto a los procesos contenciosos ajenos al derecho de familia, la sala decana de O Regueiriño tiene 237 casos pendientes, mientras que a finales de 2013 había 240.

Si atendemos al volumen de sentencias que se dictaron entre enero y marzo, la primera sala publicó en el área civil 37 fallos judiciales en procesos contenciosos y 8 en procesos de familia. La jueza Carmen Riveiros también dictó 48 decretos (cinco de ellos eran actos de conciliación) y 53 autos finales.

Desde el año pasado, el Juzgado Número 1 tiene la misma plantilla que el 2: seis personas, entre dos gestores, tres tramitadores y un auxilio. Aunque lleva además el decanato y las cuestiones de violencia de género, hay que tener en cuenta que el Número 2 se encarga además del Registro Civil.