A Estrada se convirtió esta tarde en una especie de rincón de Estados Unidos. Los norteamericanos abundan a realizar concursos gastronómicos en los que predomina la velocidad a la hora de comer grandes cantidades de comida.

La hamburguesería estradense Florida rescataba ese formato que podemos visionar en algunos programas de televisión. Su reto consistía en comer una hamburguesa de un kilo y medio en el menor tiempo posible. La iniciativa fue un éxito. El local se llenó. Decenas de clientes aceptaron el desafío. El ganador logró acabar este "macroplato" en poco más de un cuarto de hora, concretamente en veinte minutos y once segundos. Le deseamos una feliz digestión.