Los integrantes de la Mesa da Auga de Silleda, reunida la noche del pasado miércoles, analizan las dos ofertas presentadas por la empresa concesionaria del servicio, Espina y Delfín. De entre ellas, "la más razonable" para el gobierno local es la que propone ampliar la concesión por un plazo de cinco años. Esta posibilidad permitiría, según explican fuentes municipales, unificar los contratos de abastecimiento y saneamiento de las dos depuradoras -la de Silleda y la de A Bandeira-. Ello conllevaría una reducción en el precio del agua de "en torno a un 20%" y permitiría cancelar "buena parte de la deuda" que la Administración local tiene contraída con la citada firma.

La otra vía planteada consistiría en continuar como hasta el momento. Es decir, que Espina y Delfín siga encargándose del abastecimiento en Silleda -tiene contrato hasta 2016-, pero con la concesión de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de la capital trasdezana finalizada en 2013. Además, la planta bandeirense está siendo gestionada ya por el Concello desde el pasado verano. De este modo, la Administración local continuaría arrastrando el problema de la gestión de aguas residuales, servicio que tendría que seguir asumiendo. Además, se vería obligada a negociar con la empresa un plan de pagos a la empresa que "ahora mismo no se puede asumir", según reconoce el alcalde, Manuel Cuiña.

Cabe recordar que el Concello asume desde hace siete años el incremento de las tasas de abastecimiento de agua, congeladas en 2007 tras movilizaciones vecinales. La distinta caducidad de las concesiones -la de abastecimiento dentro de dos años, y la de saneamiento ya finalizada en 2013- es una de las cuestiones que "más problemas plantea ahora", según el gobierno, que lamenta el "raro" proceso de adjudicación llevado a cabo en los años noventa. El abastecimiento fue adjudicado en 1996 por dos décadas y el de la EDAR de Silleda, en 2013 por un período de diez años.

"Defendemos la ampliación de la concesión porque, además, conseguimos unificar al fin los dos contratos y evitamos los problemas que supone la gestión de las depuradoras, además de reducir la deuda del Concello", argumenta el regidor.

El BNG, integrante de la Mesa junto a los restantes grupos políticos, los colectivos vecinales Olaia y Avema y la asociación de empresarios y comerciantes (ECOS) ahondó ayer en el análisis de los planteamientos. Concretó que si se opta por ampliar la concesión hasta 2021, como sugiere el gobierno, la empresa asumiría los servicios de abastecimiento y alcantarillado de las dos EDAR y los bombeos de O Castro, Toiriz y Chapa, lo que supondría mantener el precio de abastecimiento doméstico en 0,486386 euros con un mínimo de consumo de 30 metros cúbicos por abonado y trimestre, subiendo los excesos a 0,58 euros". En el caso del alcantarillado, la cuota fija para hogares y comercios sería de 2,50 euros/abonado/mes; y el servicio de depuración de residuales sería de 0,45 euros metros cuadrados, con un exceso de 0,50 euros/metro. Con este paquete, la empresa propone condonar la deuda en más de 100.000 euros.

La otra propuesta, advierte el BNG, supondría una actualización de las tarifas y la negociación de un plan de pagos para amortizar la deuda, que cifra en 300.000 euros más intereses, y que permitiría finalizar la relación con la firma en 2016.