José Benito Alonso posee una finca forestal de 1,5 hectáreas en el lugar de Croa, un enclave que en los mapas del Sigpac se incluye en el área de Penachousa. La parcela está a más de 100 metros de la línea del pantano de Portodemouros y forma parte de la Red Natura. Hace más de tres meses, este vecino de Portodemouros decidió plantar eucaliptos en una tierra que antaño había dado pinos. Son las dos especies arbóreas más comunes de la zona."Consulté con el forestal que atiende Agolada y Vila de Cruces y me indicó por escrito que mi finca no figuraba en Red Natura", explica. Llamó al Concello para cerciorarse y un funcionario le explicó que o bien le facilitaba las copias que podía imprimir de internet o bien, si él lo deseaba, podía sacar la información desde su casa, como explica el alcalde, Ramiro Varela.

Pero Alonso optó por desplazarse a Pontevedra para obtener la documentación, y cuál fue su sorpresa al ver que su propiedad sí forma parte de Red Natura. A partir de aquí comienzan las continuas visitas de técnicos, que recalcan que la Red Natura está marcada con postes que, en realidad, o apenas son visibles o han sido arrancados por las máquinas desbrozadoras. Este vecino, además, tiene que lidiar con la situación de la finca colindante, en la que antaño también se plantaron eucaliptos y cuyo dueño "el viernes pasado tenía que aplicar un producto para que secasen las raíces de los eucaliptos ya talados, pero que esta semana, al parecer, ya ha cambiado la norma y no tiene que hacer esto". Es más, un equipo de agentes medioambientales visitó ayer por la tarde a Benito Alonso para indicarle dos cosas: en la parcela vecina sí podrán plantarse eucaliptos, porque ya los tuvo anteriormente. Pero él deberá arrancar sus más de 1.000 eucaliptos y plantar pinos -en un principio tendrían que ser árboles frondosos-. Los costes ascienden a más de 3.000 euros, pero es que la multa a la que se enfrenta podría llegar a los 30.000. En un escrito, Alonso asegura sentirse "indefenso por los errores de los demás", ya que los responsables de toda esta polémica "son el agente forestal, por hacer un permiso a boleo; y el Concello, por no informar y puntualizar por dónde transcurre la Red Natura".

No es el primer encontronazo entre este vecino y el Concello. El alcalde recuerda que "intentó vendernos una finca expropiada por Fenosa que había sido suya para construir el club fluvial. Al final, plantó pinos en ella".