El BNG de Rodeiro considera que la inversión de casi 580.000 euros en el campo de fútbol municipal de A Raña "no se ajusta a la lógica política". Su propio portavoz municipal, Alberto Lamazares, que lleva nueve años jugando al fútbol en Rodeiro, asegura que "es muy difícil" que vaya a haber equipo en los próximos años, dado el despoblamiento y el envejecimiento demográfico. "Vendremos a jugar al fútbol desde Lalín, siempre y cuando haya equipo", apostilla.

Asimismo, el concejal desmiente que la dotación de hierba artificial sea una demanda de los jugadores, sino que estos se quejan de tener un "campo abandonado", pero apuestan por mantener la hierba natural. "Va a ser el segundo campo de fútbol que hace Luis López; el primero no vale para jugar después de tres meses", añade Lamazares. Y critica el retraso en la entrega de la subvención al club, que el año pasado llegó a los tres meses de acabar la temporada.

El edil critica la apuesta de López por "obras faraónicas" y "de cara a la galería", en vez de apoyar proyectos como el centro de día, escuela infantil, vivienda social o alternativas a la producción láctea. Alega que, con estas políticas, los niños o los mayores tienen que desplazarse a Lalín para ser atendidos.