No son buenos tiempos para el turismo, ni siquiera meteorológicamente hablando. La crisis económica repercute negativamente en el sector, que este año tiene en la lluvia un enemigo más que combatir. Los turistas no se animan a viajar, porque su poder adquisitivo ha bajado, en la mayoría de los casos, y los establecimientos hosteleros hacen números para superar la Semana Santa.
La presidenta de la asociación de casas de turismo rural Mar de Compostela, Ana Villamayor, apunta que, de media, las 18 viviendas adheridas al colectivo -pertenecientes a las comarcas de Tabeirós-Terra de Montes- cuenta con un nivel de ocupación que ronda el 50%. Dice confiar en que "a última hora" pueda incrementarse la cifra. Por lo general, el alquiler de casas completas "es el que mejor funciona", por ser más económico que la reserva de habitaciones individuales. Es cada vez más habitual que se reúnan familias o grupos de amigos para costear el uso de una vivienda al completo, lo que implica poder utilizar la cocina y, consecuentemente, ahorrar en desayunos, comidas y cenas.
Villamayor apunta que la mayoría de los clientes han reservado para "dos, tres o cuatro noches; toda la semana, desde luego que no", aclara. Se trata de un tipo de turista que, normalmente, pernocta y desayuna en la casa rural y luego se desplaza a otros puntos cercanos, como Santiago o las Rías Baixas.
Madrileños, catalanes o cántrabros son los clientes que más abundan en este tipo de establecimientos esta época del año, aunque también los hay gallegos, que aprovechan los días libres para conocer la zona de interior. En opinión de Villamayor, la lluvia ha desanimado a los turistas, aunque el principal problema es la crisis. De hecho, recuerda que "en 2008 la ocupación en Semana Santa podía llegar al 70 o 75%", lejos del nivel actual.
Bajar los precios como reclamo no parece la solución, ni tampoco sería viable "porque las casas están bien acondicionadas, y costó arreglarlas", explica. Sin embargo, sí existen ofertas de última hora para intentar ocupar los cuartos libres. "La gente también pide rebaja, la verdad", reconoce. De media, el coste de alojamiento y desayuno para una persona en las casas de Mar de Compostela es de 25 euros.
Desánimo
Responsables de hoteles de la zona admiten su "desánimo" viendo el número de reservas para estos días. Desde el Hotel Palacio de Lalín declinan dar cifras, pero apuntan que hay "muy poco" turista, y que el nivel de ocupación es "peor que otros años". El Ramos, de Silleda, está al 30%, pero en gran medida, gracias a la presencia de peregrinos, que empiezan a llegar, y no tanto por visitantes que acudan a pasar la Semana Santa. Con todo, confían que llegue gente "a última hora".
Realidad totalmente opuesta vive el hotel Torre do Deza, de Lalín, al 100% desde hoy y hasta el domingo, mientras que desde el pasado domingo hasta ayer, alcanzó el 70%.
