El representante de la CIG en la mesa de negociación, Antón Álvarez Merayo, aseguró ayer que los representantes de los trabajadores "no están dispuestos a perder derechos" sociales adquiridos durante años ni a que la patronal imponga "reducciones sociales sin ofrecer" contraprestaciones a cambio. Exige que pongan sobre la mesa las cuestiones salariales.

Por su parte, el representante de CC OO en la mesa de negociación, Fran Estévez, advirtió que si se pretende "trabajar más y cobrar menos vamos a tener problemas". Apunta que son la financiación y la falta de carga de trabajo lo que amenazan a las empresas y no los salarios.

Tanto Merayo como Estévez coinciden con Lourdes Diz en que se puede adaptar el texto del convenio a la ley pero no ir más allá aprovechando la coyuntura para recortar derechos. Lourdes Diz cree que la propuesta de la patronal "da 10 pasos atrás" y señala que eliminaría los atrasos de 2012.