Después de años de trámites y conflicto, el alcalde estradense, José López Campos, anunció en la jornada de ayer que ya existe un acuerdo para poder rematar las polémicas aceras de A Sagrada, en la parroquia de Codeseda. El regidor indicó que hace aproximadamente 15 días se reunió con los vecinos para abordar la solución técnica ideada para dar continuidad al tramo de aceras que ya se encuentra construido. Después de la realización de ciertos ajustes, se ofrecieron tres posibles alternativas a los vecinos y, según explicó el munícipe, estos dieron luz verde a una de las propuestas en un nuevo encuentro celebrado ayer.

El primer edil explicó que la solución que se adoptará es prácticamente igual a la que figura en el proyecto y que se trataría simplemente de ajustar la acera y dejar zona de aparcamiento. De esta manera, la infraestructura continuarán de manera que, tras pasar la rotonda, habrá de salvar el desnivel existente con una zona de acera superior y otra en pendiente. Cada una de estas partes tendrá un ancho de 1,80 metros. Justo enfrente se habilitará una zona de aparcamiento, con un ancho de 2,40 metros.

La zona de acera que se construiría en un plano elevado, la más pegada a las casas, se limitará con unos elementos de seguridad para salvaguardar a los usuarios del desnivel existente.

Una vez alcanzado el acuerdo, todo estaría listo para que la Diputación de Pontevedra proceda a la adjudicación de los trabajos constructivos. El alcalde explicó que aprovechará su visita de mañana viernes a la institución provincial para trasladar a su presidente, Rafael Louzán, lo acordado con los vecinos. Las previsiones que baraja el ayuntamiento pasan por que la obra pueda adjudicarse en el transcurso del próximo mes de abril.

López Campos calculó que, de este modo, la ejecución de la infraestructura podría arrancar entre la primavera y el verano. Estimó el mandatario que la actuación podría precisar un plazo de ejecución aproximado de unos dos meses, aunque se trata de una cuestión que se definirá con exactitud en el momento en el que se adjudique la obra.

Cabe recordar que en la polémica franja de terrenos que había frenado el avance de la infraestructura se apostó por ocupar la totalidad de los predios al entender que son públicos, de acuerdo al contenido de la última sentencia firme al respecto.